El jueves 7 de noviembre estará marcado por varias acciones sindicales llevadas adelante por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) que se movilizará a lo largo y a lo ancho del país con una consigna unificada: ir en contra de los ataques a los organismos del Estado que Javier Milei prometió -y está cumpliendo- desaparecer.
Así las cosas, la metodología de lucha será variada y dependerá de cada territorio: desde cortes de rutas en todo el país, pasando por radios abiertas, asambleas y la medida por excelencia, no asistir a los puestos de trabajo que dependan del Estado.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, tendrá tres postas. La primera fue la Legislatura porteña; la segunda estará en el Ministerio de Hacienda de la Ciudad de Buenos Aires y, por último, movilizarán al Ministerio de Economía de la Nación, seno del diseño de las políticas económicas de ajuste.
Al momento, no se registraron atisbos de conflictos con la policía, a casi 24 horas de que se haya activado el protocolo antipiquetes con un grupo de jubilados. Finalmente, y tras los empujones y golpes recibidos, un trabajador jubilado terminó con convulsiones y hospitalizado.
Ahora, los trabajadores y trabajadoras del Estado, denunciaron que las paritarias que ofrecieron desde el Gobierno nacional son paupérrimos: del 2% para el mes de noviembre; el 1% en diciembre más un bono de $30.000 por única vez.
Si bien esta paritaria fue aprobada de manera express con la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), los trabajadores de ATE no la convalidaron. Es que, según calculan, el poder adquisitivo en el Sector Público Nacional se degradó un 34%.
En esa misma línea, expresaron que la pérdida del salario para finales de 2024, sería de un 50% en caso de no poder arreglar paritarias. Es por eso que el secretario general Rodolfo Aguiar expresó: "La última paritaria fue escandalosa", dijo en referencia a la última firmada por UPCN.
Además, expresó: "Un acuerdo que se celebró a escondidas, fuera de todos los ámbitos institucionales mediante el cual se aplicó una rebaja salarial sin precedentes en el sector público. Tenemos que seguir multiplicando las protestas y preparar una nueva medida de fuerza general". Desde ATE, expresaron que es necesario "terminar con esta farsa de negociación salarial" además de la pronta "recuperación de los deteriorados ingresos en la Administración Pública".