26 Diciembre de 2019 09:17
La Legislatura bonaerense tratará hoy un paquete de medidas económicas impulsadas por el gobernador Axel Kicillof, entre las que se encuentran el aumento del impuesto inmobiliario urbano y el rural, que subirán en base a la inflación de 2019, aunque se esperan subas de entre un 15 y un 75 por ciento. El jefe de Gabinete de la Provincia, Carlos Bianco, negó que se trate de un “impuestazo”, y minimizó el impacto.
El proyecto prevé una suba promedio de los impuestos del 54,6 por ciento, en línea con la inflación de este año. Sin embargo, podrían llegar al 75 por ciento para quienes posean campos cuya valuación fiscal supere los $3 millones y las 2.000 hectáreas. Según Bianco, se trata de un “puñado” de 300 grandes productores, y negó que se trate de un “impuestazo”: “Sin recursos es imposible hacer política industrial o política social”, remarcó en declaraciones a radio La Red.
Con la suba impositiva, el objetivo de Kicillof es financiar la emergencia social y económica sancionada la semana pasada. En este sentido, plantearon un esquema de “progresividad”, con el objetivo de “evitar que el esfuerzo recaiga sobre los sectores más vulnerables, que son los principales afectados por la actual crisis que atraviesan el país y la Provincia”.
En este sentido, la iniciativa impactará en los impuestos Inmobiliario Rural y Urbano. En el caso del Urbano, está previsto un piso con una cuota fija de $207, y una alícuota sobre el excedente del límite mínimo de 0,028 %, en el caso de propiedades cuya valuación no superen los $179.851. Para las propiedades que superan los $10 millones la alícuota crece al 1,725 %, mientras que la cuota fija será de $118.646.
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En el Inmobiliario Rural, los campos que superen los $105 mil pagarán una alícuota de $1.059, y los que superen los $3 millones tendrán una cuota fija de $112.327, y una alícuota sobre el excedente de 7.059 %, cuando el valor del campo supere los $3 millones y la superficie de tierra libre de mejoras sea superior a las 2 mil hectáreas.Ingresos Brutos tendrá subas específicas, que no superarían el 1 %. Con estas medidas, el Gobierno bonaerense busca “hacer más justa la recaudación, cobrando más al que más puede y generando alivio a los pequeños y medianos productores y propietarios”.
El ministro de Hacienda, Pablo López, aclaró además que el proyecto tiene “topes segmentados”, y remarca que en el caso del Urbano están exentos quienes posean una sola vivienda pequeña y que quienes posean propiedades de menor valor afrontarán aumentos “sensiblemente por debajo de la inflación”. En este sentido, ejemplificó: “Para las propiedades de menor valor la variación máxima es del 15 %, y en el segmento siguiente no supera el 35 %”.
Desde el Ejecutivo provincial advirtieron que la Provincia atraviesa una “situación de emergencia”, y que se debe impulsar la reforma impositiva para “atender urgencias y prioridades definidas”. En este sentido, adelantaron que ARBA otorgará descuentos del 20 % para quienes paguen los impuestos de forma adelantada y anual.
El jefe de Gabinete de Kicillof dijo que las mayores subas en el área urbana afectarán al 7 por ciento de los propietarios, y que el 86 % de las propiedades van a tener un aumento menor a $3.500 y se podrá pagar en cinco cuotas”. “No me parece que se pueda considerar un impuestazo”, agregó.
