15 Abril de 2017 19:21
Los últimos días de Lázaro Báez fueron bastante agitados. Tras haber cumplido un año de encierro el pasado 5 de abril por una causa de lavado de activos, fue trasladado a la Clínica Los Arcos, del barrio de Palermo, para ser sometido a una serie de estudios luego sufrir una arritmia.
Ya recuperado, el empresario kirchnerista abandonó el Hospital Penitenciario Central (HPC) del penal de Ezeiza , donde se encontraba en revisión, para regresar a su celda del Pabellón de detenidos de mayores de cincuenta años y baja conflictividad.
Uno de los tantos traslados del empresario "k".
Fuentes judiciales confirmaron que Báez "ya estaba bien" y "él mismo expresó su deseo de regresar a su celda" del Pabellón F, módulo 6, del establecimiento carcelario. El traslado desde el HPC a su celda se produjo "pasado el mediodía, alrededor de las 16 horas", por lo que el empresario “K” pudo mirar el Vía Crucis en Roma, desde el televisor de su pabellón.
Báez fue atendido en Los Arcos tras sufrir una fuerte arritmia.
El dueño de Austral, y procesado por lavado de dinero, presencio los dichos del Papa Francisco junto al resto de los detenidos, entre ellos su contador Daniel Pérez Gadín y el narcotraficante colombiano Alejandro Gracia Álvarez, conocido como "Gato Seco".
Báez ingresó el jueves al HPC tras abandonar el Sanatorio Los Arcos, donde estuvo internado 24 horas y le hicieron estudios coronarios tras sufrir el martes a la noche en su celda una arritimia "anormal", es decir, más aguda de la que ya tiene diagnosticada.
El momento en el que Báez llegaba a la clínica.
El empresario había regresado el jueves a la tarde al penal de Ezeiza con una indicación médica de pasar 48 horas en observación, pero su traslado a la celda que ocupa en el pabellón se adelantó y, en vez de concretarse a última hora de la tarde, cuando se cumplía el plazo, se realizó pasado el mediodía.
Milani sigue detenido sin vecinos
El ex jefe del Ejército César Milani continúa internado en el Hospital Penitenciario Central del penal de Ezeiza, pero ya no está aislado del resto, tal como lo había dispuesto la Justicia a pedido de su defensa, por considerar que su integridad física "estaba en riesgo" en la celda junto a otros reos.
En febrero pasado, el ex jefe del Ejército fue detenido en la provincia de La Rioja.
Fuentes judiciales aseguraron que el militar retirado, acusado por delitos de lesa humanidad, continua internado en el HPC, pero ya no aislado en su celda de ese pabellón de salud, similar a una habitación de hospital, sino participando de la vida del pabellón, "caminando por los pasillos" y con acceso a un patio a cielo abierto.
Milani estaba bajo el sistema de Resguardo a la Integridad Física (RIF), debido al riesgo que sus abogados consideraron tenía en el penal, que luego avalado por la Justicia. Su traslado desde la Unidad 31, para detenidos por crímenes de lesa humanidad, al HPC fue dispuesto por el juez federal de Lomas de Zamora, Juan Pablo Augé.
En un pabellón similar estaría César Milani.
El magistrado había hecho lugar a un hábeas corpus presentado por la defensa del militar, que reclamó "atención médica y psicológica". No obstante, Milani ya estaba bajo el sistema RIF en la Unidad 31, de donde debieron trasladar al resto de los detenidos.
Si bien Milani está en el HPC por la orden judicial, las autoridades penitenciarias apelarían la medida ya que los médicos del Servicio Penitenciario Federal (SPF) consideran que el jefe del Ejército puede ser tratado en su lugar de alojamiento, en la Unidad 31.
Las celdas del Hospital Penitenciario Central son más grandes, tienen camas como las de los hospitales y un baño apartado, además de contar con los instrumentos médicos que se requieren para el cuidado de los pacientes, lo que convierte al lugar en un lugar codiciado dentro del penal.
l ex jefe del Ejército durante el Gobierno de Cristina fue procesado por asociación ilícita.
Los argumentos en los que se basó Mariana Barbitta, abogada integrante del equipo de la defensa del el ex jefe castrense, para pedir un "hábeas corpus correctivo" para Milani fueron un "agravamiento" del estado de salud del ex jefe del Ejército entre 2013 y 2015 "por las condiciones de encierro" y por "una situación psicológica vinculado a un contexto hostil".
En el HPC se encuentra también el represor condenado por crímenes de lesa humanidad y genocidio cometidos durante la dictadura cívico militar, Miguel Etchecolatz, principal sospechoso de la desaparición del testigo Jorge Julio López, en 2006, y puesto bajo observación por la hipertensión que padece y el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular.
Milani, durante el momento del traslado a la cárcel de Ezeiza.
Milani fue detenido en La Rioja el 17 de febrero pasado, y procesado por los secuestros y torturas de Pedro Adán Olivera y su hijo Ramón, en 1977, y Verónica Ligia Matta, en 1976. Un pedido posterior de la defensa, a través de un nuevo hábeas corpus, solicitó que Milani fuera puesto bajo el sistema RIF (Resguardo de la Integridad Física), ya que se sentía amenazado.