El centro porteño y algunas capitales del interior del país son el escenario de una movilización opositora al gobierno de Alberto Fernández, que enarbola consignas variadas. Los manifestantes cuestionan la cuarentena, el cepo, el desplazamiento de los camaristas Bruglia y Bertuzzi, etc. La convocatoria fue motorizada desde las redes sociales y, aunque no es "oficial" de Juntos por el cambio, cuenta con la adhesión de varias figuras de ese espacio, entre ellas la propia presidenta del PRO Patricia Bullrich, que se movilizó en su automóvil.
Sectores críticos al gobierno se juntan en lugares céntricos de diferentes provincias omo el Patio Olmos y la plaza San Martín de Jesús María en Córdoba; la plaza Moreno en La Plata; el cruce de Sarmiento y Avenida San Martín en Mendoza y el Monumento a la Bandera en Rosario.
"Todos somos Rosenkrantz", decía una de las consignas del Obelisco, en defensa del actual presidente de la Corte Suprema. "Los Fernández fundieron el país y la gente está sin trabajo" y "Basta de saraza" eran otras consignas. También decían "Los jueces no se tocan" , "Delincuentes presos" y otras por el estilo. Algunos manifestantes se dirigieron al domicilio particular de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. El presidente Alberto Fernández condenó, precisamente, esa actitud.
Disentir con un gobierno es parte de la democracia. Movilizarse, aun con el riesgo que implica en una pandemia, también.Pero promover una convocatoria a una protesta en el domicilio de una persona solo fomenta la grieta y daña esa convivencia democrática.#ArgentinaUnida
- Alberto Fernández (@alferdez) October 12, 2020
El Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, también repudió la manifestación a la casa de Cristina.
Repudiamos que se difunda como punto de protesta el domicilio de la vicepresidenta @CFKArgentina.Le pedimos a la oposición que se exprese contra estas prácticas peligrosas y tome el camino del diálogo democrático y la sensatez. pic.twitter.com/RcNEa3aFV4
- Santiago Cafiero (@SantiCafiero) October 12, 2020Esta es la octava movilización en contra del gobierno de Alberto Fernández. Las anteriores fueron en los meses de junio y julio (una por mes), hubo tres marchas en agosto y otras dos en septiembre.