18 Mayo de 2017 17:18
"Todos van a ir presos", habría declarado Joesley Batista en la noche del 26 de abril, según afirma el medio brasilero Epoca. Por cómo se están desenvolviendo los hechos, su diagnóstico bien podría terminar siendo acertado: es que el magnate de la carne es una pieza clave en el destape de la trama de corrupción que hoy por hoy pone en jaque al gobierno de Michel Temer en Brasil.
Su declaración no era casual. Si alguien sabía del escándalo que estaba por avecinarse era él, director de 44 años del frigorífico JBS, el mayor frigorífico de Latinoamérica. Acorralado él también por casos de corrupción, vio su salida al salpicar al presidente Temer: sus grabaciones de reuniones secretas con el mandatario bien podrían desencadenar un juicio político, o su renuncia. De esta forma, restaría años a sus causas.
Batista, el empresario de 44 años que pone en juego el gobierno de Temer
Los audios todavía pertenecen exclusivamente a la justicia, pero se conocen las desgrabaciones. Según reporta O Globo, en ellos Temer le dice "Tenés que mantener eso, ¿entendido?", en referencia a los pagos por coimas.
¿Cuáles fueron los motivos detrás de las grabaciones secretas y quién es Batista, el "rey de la carne" que pone en jaque a todo un gobierno?
El señor de los novillos
El nombre de Joesley Batista no es ajeno en Brasil, sobre todo en el mundo de los negocios. Propietario del holding J&F Investments, dueño de JBS, el empresario es el director del frigorífico que controla el mercado del procesado de carne y cuero en el mundo.
La cartera de la empresa está compuesta, entre otras marcas por Big Frango, Seara Alimentos y Swift, entre otras. Con la compra de está última -empresa de origen argentino-, en 2005, comienza la expansión internacional de la empresa. Al año siguiente, JBS se convirtió en la primera empresa en el sector frigorífico en salir a la bolsa de valores de Brasil. A través de nuevas adquisiciones, comenzó a incursionar en Estados Unidos y Australia.
JBS vende sus productos a 150 mercados del mundo.
Hoy en día opera con plantas productivas en 24 países y lleva sus productos a más de 150.
Batista ocupa el puesto número 66 de las personas más ricas de Brasil según Forbes, junto a su hermano. Se estima que manejan una fortuna de 3.100 millones de reales. El negocio fue herencia de su padre con quien trabajó desde muy joven.
En 2015, le compra al gigante Carmargo Correa el control de Alpargatas, dueña de marcas como Havaianas, Osklen, Mizuno, Timberland y Dupé.
En 2015 las Havaianas pasan a manos de JBS.
Su ascenso a la fortuna y a la fama no estuvo exento, sin embargo, de polémicas. En marzo de este año, una investigación policial en Brasil sobre casos de sobornos a inspectores de higiene, para que aprobaran la venta de mercadería en mal estado, tratada con químicos para que pueda ser comercializada. JBS supo salir del paso, negando cualquier conexión a estos delitos, pero la mancha ya estaba.
