20 Septiembre de 2019 19:00
El juez federal Claudio Bonadio decidió enviar este viernes a juicio oral y público a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, al diputado nacional Julio De Vido y a otro medio centenar de imputados en la causa llamada “cuadernos de la corrupción” y dos expedientes derivados de esa pesquisa.
El magistrado lo dispuso a través de una resolución difundida este mediodía, en la que, además, insistió con su pedido de desafuero de la senadora y actual candidata a vicepresidenta por el Frente de Todos "con el fin de cumplir con la prisión preventiva" dispuesta en este expediente y confirmada en segunda instancia.
De esta forma, Bonadio resolvió la finalización de la etapa de instrucción de este expediente que ahora será enviado al Tribunal Oral Federal (TOF) 7, el cual salió designado por sorteo para llevar adelante el debate que tendrá en el banquillo de los acusados a medio centenar de imputados, entre ex funcionarios y empresarios.
La causa de los cuadernos de la corrupción comenzó con la revelación de anotaciones escritas por Oscar Centeno, ex chofer de Roberto Baratta, sindicado como presunto "intermediario" entre el ex ministro de Planificación, Julio De Vido, y empresarios, durante el kirchnerismo.
El juez Bonadio señaló en su resolución que se investigó una "asociación ilícita que desarrolló sus actividades aproximadamente desde principios del año 2003 hasta noviembre del año 2015, y cuya finalidad fue organizar un sistema de recaudación de fondos para recibir dinero ilegal.
Esto último con el fin de enriquecerse ilegalmente y de utilizar parte de esos fondos en la comisión de otros delitos, todo ello aprovechando su posición como funcionarios del Poder Ejecutivo Nacional".
El magistrado también elevó a juicio el tramo de la causa en el que se investigan maniobras de supuesto lavado de dinero protagonizadas por el fallecido ex secretario presidencial Daniel Muñóz y su entorno y el segmento del expediente en el que se investigan irregularidades en el otorgamiento de subsidios a empresas vinculadas con el transporte ferroviario.
Entre las personas que deberán sentarse en el banquillo de los acusados por este expediente y dos de sus derivaciones, se encuentran el propio Baratta, hoy detenido, al igual que De Vido, como así también el ex secretario de Obras Públicas José López y Claudio Uberti, ex titular del Órgano de Control de Concesiones Viales (Occovi) durante la gestión de gobierno del Frente para la Victoria.
En el tramo principal de la causa de los Cuadernos, la ex presidenta está procesada con prisión preventiva -aunque con esta última medida sin cumplir por gozar de fueros parlamentarios- como presunta responsable de los delitos de asociación ilícita, "en calidad de jefa", y cohecho pasivo, en calidad de coautora.
De acuerdo al fallo de 157 páginas emitido por Bonadio, debajo de la ex presidenta en la pirámide organizacional de la asociación ilícita se encontraban De Vido y Baratta, a quienes les fue asignado el rol de organizadores y a los que también se acusa por cohecho pasivo.
Entre los sindicados como organizadores de la asociación ilícita se encuentra el arrepentido ex titular de la Cámara de la Construcción Carlos Wagner -quien se refirió a la "cartelización" de la obra pública- y el arrepentido financista Ernesto Clarens, quien aportó listados de las supuestas coimas recibidas de manos de empresarios.
La mayoría de los empresarios elevados a juicio fueron acusados de los delitos de cohecho activo, aunque uno de ellos figura en la resolución de Bonadio como miembro de la supuesta asociación ilícita: se trata de Gerardo Ferreyra quien se encuentra bajo prisión preventiva domiciliaria mientras aguarda que la Cámara Federal porteña resuleva su planteo de excarcelación.
Entre los empresarios acusados por el supuesto pago de coimas están Enrique Pescarmona, Aldo Benito Roggio, Eduardo Hugo Eurnekian, Alberto Taselli, Alejandro Pedro Ivanissevich y Hugo Dragnetti y Ángel Calcaterra, entre otros.
En el mismo fallo, Bonadio dispuso el sobreseimiento de los dirigentes políticos que están o estuvieron vinculados a la organización La Cámpora, como Máximo Kirchner, Eduardo "Wado" De Pedro, Andrés "Cuervo" Larroque, José Ottavis y Julián Álvarez en relación con el delito de asociación ilícita.
De todas formas, existe aún un expediente desprendido de la causa de los cuadernos que está en manos de la jueza María Romilda Servini en la que se investiga si fue utilizado dinero ilegal en campañas electorales; hecho que se les había achacado a los dirigentes ahora sobreseídos.
En el caso del ex jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, también investigado en la causa de los cuadernos, fue sobreseído en orden al delito de asociación ilícita, mientras que el juez Bonadio dispuso su elevación a juicio oral por 18 hechos de cohecho pasivo (cobro de coimas) en calidad de partícipe secundario.
Por otra parte, entre los sobreseídos de todos los cargos se encuentra el ex secretario general de la Presidencia durante el kirchnerismo Oscar Parrilli, quien había sido acusado de recibir dinero ilegal de manos de Baratta, por aparecer en las anotaciones de Centeno.
Bonadio rechazó excarcelar a Cristóbal López y Fabián De Sousa
Si bien el Tribunal Oral Federal 3 otorgó la encarcelación bajo palabra a los empresarios Cristóbal López y Fabián De Sousa en la causa Oil Combustibles, donde están siendo juzgados, acusados de desviar a otras de sus compañías el impuesto a los carburantes en lugar de derivarlos al fisco, por un monto original de 8.000 millones de pesos, Bonadio decidió rechazó el pedido de la defensa de los empresarios, la cual solicitó la inmediata liberación de ambos.
De esta manera, López y De Sousa seguirán detenidos bajo la órbita del juez en la investigación de supuestos delitos en la llamada "causa de los cuadernos" de las coimas, sobre el presunto pago de sobornos de empresarios a funcionarios para el acceso a obras públicas en el anterior gobierno.