Indudablemente la candidata a presidenta del Frente de Izquierda y Trabajadores-Unidad, Myriam Bregman, fue la gran revelación del primer debate presidencial realizado durante la noche del domingo en el Centro de Convenciones Provincial Forum de Santiago del Estero. No por sus propuestas concretas, sino como se desenvolvió durante las discusiones políticas. Incluso, la dirigente fue una de las pocas que en verdad aprovechó sus respectivos "derecho a réplica".
Sin ir más lejos, la candidata de izquierda dio en la tecla y se volvió tendencia en las redes sociales al calificar a Javier Milei de ser un "gatito mimoso". “Milei es un empleado de los grandes empresarios, que han ganado millones estos años, algunos viviendo del estado, y que con él esperan ganar mucho más. No es un león, es un gatito mimoso del poder económico”, disparó.
Además, fue una de las pocas postulantes en tocar el tema del momento: el escándalo que protagonizó el fin de semana Martín Insaurralde con Sofía Clerici. "Los vas a escuchar hacer promesas de campaña, incluso pelearse, pero están todos involucrados en el escándalo de Chocolate en la legislatura". Y claro, se acordó de Martín Insaurralde: "Mientras hambrean al pueblo, se van en sus yates de lujo a pasear por Europa", señaló en su presentación.
Y como frutilla del postre, entre otros feroces comentarios, Bregman se cruzó con el candidato libertario a la hora de hablar sobre derechos humanos. "Nosotros valoramos la visión de memoria, verdad y justicia, empecemos por la verdad, no fueron 30.000 los desaparecidos, son 8.753. Estamos absolutamente en contra de una visión tuerta de la historia, para nosotros durante los 70 hubo una guerra", fueron las palabras que usó Milei.
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Y quien no dudó en salirle al cruce fue la candidata del Frente de Izquierda y Trabajadores-Unidad. Si bien la postulante a presidente ya había agotado los cinco "derecho a réplica" con los que contaba para responderle o chicanear a sus adversarios, aprovechó su mensaje de cierre para dejarle bien en claro cómo fueron las cosas al libertario: "Son 30 mil y fue un genocidio".Con la calma del día después, la abogada dialogó con Argenzuela y como el que se sabe ganador, en este caso, ganadora, definió el debate presidencial "como una gran instancia donde por un ratito todos los candidatos y candidatas estamos en igualdad de condiciones para poder expresar nuestras ideas, para mostrar que la izquierda tiene propuestas, tiene ideas para salir de esta situación crítica, terrible que está nuestro país y que cuesta mucho cotidianamente".
Y manifestó: "En ese momento todos estamos ahí, podemos hablar, podemos contrastar, me hubiese gustado que haya más posibilidades de cruce, pero intenté aprovechar cada minuto que tenía en ese sentido, en las preguntas, en las réplicas, eso fue lo que más me interesó y es difícil, porque pensar que los tiempos que tenemos son muy cortitos, dos minutos, 45 segundos para la réplica, pero bueno, intenté aprovecharlo todo lo que se pueda para expresar nuestras ideas".
Consultada sobre la postura negacionista de Milei, quien además de modificar la cantidad de desaparecidos en la dictadura señaló que se trató de una "guerra" donde "las fuerzas del Estado cometieron excesos", Bregman reveló: "Terminamos casi en un cruce ahí fuera de aire también, porque a mí me duele, a mí me desapareció Jorge Julio López de mi lado, entonces que me venga con esas ideas, como que estaba hablando de cifras..."
Y siguió: "Para mí ningún compañero es una cifra, ningún compañero es una cifra, yo vi a muchos sobrevivientes dejar su vida en la lucha contra la impunidad. Entonces que algunos vengan a hablarlo tan alegremente por un cálculo electoral o porque no sé qué, yo no lo voy a naturalizar, por eso tampoco gasté o consumí todas las réplicas al principio, porque quería tener tiempo para poder replicar al final".
Según contó la candidata de izquierda, una "mamá" se acercó al lugar donde cenó anoche y le aseguró que después del debate su hijo la iba a votar a ella tras las barbaridades que pronunció Milei. "Una mamá anoche se acercó en el lugar donde yo estaba comiendo y me dijo, mi hijo votó a mi ley y ahora te va a votar a vos, porque se dio cuenta que no puede votar esas ideas", contó.
Al momento de la nota, la candidata se encontraba en el aeropuerto a punto de retornar a Buenos Aires, ya que la semana próxima deberá afrontar el segundo debate presidencia. "Entrar en el juego de la dolarización es un poco lo que quiere Milei, que todos bailemos a su son y discutamos sus ideas, cuando ella dijo, ¿con qué va a dolarizar? ¿de dónde? ¿va a expropiar las cerealeras y va a tomar los dólares? ¿Vos te lo ve a Milei haciendo eso? ¿Va a establecer el control del comercio exterior para poder conseguir los dólares? No, no va a hacer nada de eso, pero bueno, le vienen bailando el son de Milei desde hace tiempo y yo no tenía ganas de hacer eso, quería discutirle los puntos que realmente le interesan a la sociedad", dijo.
Por otra parte, Bregman aseguró que le pareció "muy llamativo" que casi no se tocara la polémica que desató Insaurralde horas antes de la velada. "Es muy llamativo, porque yo creo que todos los que vemos esas imágenes después de una semana donde se conocieron los índices de pobreza, nos revolvió las tripas, no sé quién le puede pasar desapercibido y que después lleguemos a un debate presidencial y nadie diga nada, fue asombroso"´, expresó y consultada sobre si existió un acuerdo previo para no tocar el tema, remató: "No lo sé, porque tampoco se habló del caso de Chocolate, como que acaba este cándido contra la casta, pero cuando la casta muestra su peor cara, nadie tiene nada para decir, es muy llamativo".