Cuando todavía no se habían escuchado los primeros oficiales en el búnker de Unión por la Patria (UP), pero ya se sabían los resultados que mostraban las primeras mesas fiscalizadas por la misma fuerza, fue el turno de Cecilia Moreau de salir a hablar con la prensa. Sin animarse a responder preguntas, la cara de la presidenta de la Cámara de Diputados lo decía todo: la democracia cumplía 40 años y acababa de votar mayoritariamente a una persona completamente opuesta a los valores de la militancia que la recuperó en 1983.
Luego, la dinámica de las figuras de UP y las declaraciones a la prensa se hicieron casi imposible de camuflar. El acto, preparado en un escenario de cara a la Avenida Corrientes y los cientos de fiscales y simpatizantes que se habían acercado, terminó haciéndose a puertas cerradas, sólo para quienes tenían la pulsera celeste de los propios que se repartió entre dirigentes, referentes y algunos periodistas, que pudieron ver a Sergio Massa dar su discurso final.
La única alternativa que quedó entonces, fue la de esperarlos por una de las salidas traseras, desde donde BigBang pudo tener unas preguntas con el embajador en Brasil, Daniel Scioli, el precandidato derrotado de UxP, Juan Grabois y el ex ministro de Desarrollo Social Daniel Arroyo. También pasó -sin ofrecer muchas declaraciones- la actual presidenta del Banco Nación, Silvina Batakis.
"Con tenacidad, con perseverancia", fue la respuesta de Scioli a BigBang respecto a cómo se puede torcer la elección con tal desventaja. Parecía salida de un cassette de la campaña que en 2015 lo tuvo en la puerta de la Casa Rosada y la que intentó dar en 2023, antes de que las negociaciones lo dejaran afuera de las PASO y de la fórmula presidencial. "A redoblar los esfuerzos", pidió sin mucho ánimo, justo antes de pedirle a los periodistas presentes que no tomen frío.
La calidez que no tuvo el ex motonauta, salvo por el momento del saludo, sí la tuvo Grabois. El representante de Patria Grande fue uno de los pocos que no tuvo dramas en darle respuesta a los medios de comunicación presentes, además de saludar a las personas que se acercaron a pedirle una mano y ofrecerle palabras de apoyo.
"Hay que escuchar bien a nuestro pueblo, que está sufriendo. A los más humildes, que esperaban una cosa, que era empezar por los últimos para llegar a todos, no llegó. Hay que priorizar a esa gente, a los laburantes, quienes no tienen vivienda propia porque alquilan o es precaria. También entender que las castas que existen, los privilegios que existen, hay que combatirlo, que eso no lo inventó Milei. Fue la consigna de todos los movimientos populares en la historia de la humanidad y, de alguna manera, se la apropió un candidato que representa ideas opuestas", caracterizó el referente social.
"Es una simplificación plantear que es la ultraderecha. En los barrios había pibes que me decían: 'yo te voto a vos o voto a Milei'. Por ahí tiene que ver que la política no les está dando respuesta. Por ahí si se hace un análisis demasiado ideológico, el tema no se termina de entender. Si se sabe escuchar esta señal, vamos a estar mejor", opinó Grabois.
Cuando se lanzó como precandidato en UP, luego de que le negaran la posibilidad a Scioli, lo hizo con el objetivo de marcarle la cancha a las fuerzas del resto del peronismo que optarían por Massa. Con cerca del 25 por ciento de la participación total que lo eligió, el amigo del Papa Francisco reivindicó esa intención que tuvo el electorado que lo apoyó y pidió que eso se jerarquice en términos programáticos.
"Creo que hicimos algo ya significativo, que fue mostrar que hay más de un millón de electores que cree en nuestras propuestas de tierra, techo y trabajo, que cree que hay que recuperar los bienes comunes, que hay que enfrentar al Fondo Monetario Internacional (FMI) cancelando los acuerdos injustos que existen actualmente, y que inevitablemente una parte de nuestras políticas se va a tener que incorporar al programa de gobierno", aseguró Grabois. "El próximo gobierno estoy seguro que va a terminar siendo de UP", prometió.
Massa prometió dar vuelta la elección y le mandó un mensaje a Milei: "Se define si habrá trabajadores o esclavos"
"Yo no soy un genio del voto. Me formé en la lucha social, no analizando elecciones. Pero me suena que le fue muy mal a Juntos por el Cambio (JxC) también, y que va a haber -probablemente- un ballotage entre Massa y Milei y que ahí va a haber que ser muy claro respecto a lo que se le está proponiendo a la gente, y si hay planteos y compromisos concretos y creíbles, UP va a ganar", pronosticó el dirigente social."No descarto ni dejo de descartar", respondió Grabois ante la consulta de BigBang acerca de si ya daba por imposible la victoria peronista en primera vuelta, como aseguraron los más optimistas. "Yo voy a militar para que no gane una propuesta de alguien que piensa que si uno es pobre debe vender sus órganos o trabajar 18 horas sin derechos laborales, porque creo que son ideas deshumanizantes", añadió.
"Sí reconozco que hay que rediscutir los privilegios de algunos sectores que medio que no se dan cuentan que por ahí cansan un poco", opinó en el sentido de la casta política que denuncia su rival. "Hay que dar la disputa sin descalificaciones, sino con propuestas superadoras, y con la coherencia de decir lo que se piensa y hacer lo que se dice", concluyó Grabois.
También aportó al análisis político Arroyo, quien identificó a la inseguridad y la incertidumbre que viven los sectores más humildes respecto a la inflación y el precio de los alimentos, como los principales ejes en los que su fuerza debería apuntar para dar vuelta el panorama electoral. "Claramente la sociedad dejó un mensaje, que es que hay cuestiones que hay que transformar y mejorar", afirmó.
Milei triunfante, Bullrich regocijada y un Massa atónito: los números finales de las PASO
"Hay mucha gente que no está llegando a fin de mes, que la está pasando mal, mucha incertidumbre, y ahí está el punto central. Tenemos gente que aun con trabajo formal es pobre. Lo otro es la inseguridad. Esas dos cuestiones son muy determinantes en la vida cotidiana: qué hace una familia en el supermercado, si le alcanza o no, y que alguien tenga que dar dos vueltas a la manzana antes de entrar a su casa o no salir después de las 18", explicó.En el medio, el ex funcionario se vio interpelado respecto del pedido de una autocrítica por haber sido parte del gobierno de Alberto Fernández, aunque se defendió con el argumento de haber sido el ministro que sostuvo la paz social durante la pandemia de Covid-19.
El rol de la plaga vivida hace algunos años en el escenario político tiene su parte real. El actual mandatario nacional tenía, para los comienzos de esta, una popularidad cercana al 70 por ciento. Muchos de quienes lo bancaban allí, terminaron eligiendo a una opción más de derecha para castigarlo en las elecciones. Quedan dos meses para las elecciones generales, y más allá de las culpas repartidas, la autocrítica y poder rápidamente cambiar el rumbo serán armas fundamentales para la pelea en las urnas que se le viene a UP.