El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Rosenkrantz, inauguró este mediodía el año judicial frente a magistrados de todo el país y en su discurso se refirió a la crisis de legitimidad que atraviesa el Poder Judicial y brindó su mirada crítica.
Es la primera vez que Rosenkrantz encabeza la apertura del año judicial, una modalidad que inauguró años atrás su predecesor, Ricardo Lorenzetti, a quien logró destronar en una jugada política de palacio.
Pero luego de haber llegado a la presidencia del máximo tribunal, Rosenkrantz perdió poder a manos de la mayoría integrada por Lorenzetti, Horacio Rosatti y Juan Carlos Maqueda.
Rosenkrantz habló sobre la crisis en la Justicia.
El acto fue realizado en el patio del Palacio de Tribunales. Estuvieron presentes los jueces de las dos cámaras de Casación Penal, los miembros de la Cámara Federal y los jueces federales de Comodoro Py, que oyeron las palabras del presidente.
Las 8 frases más relevantes:
"Toda crisis de legitimidad es en gran parte una crisis de confianza. Los argentinos están perdiendo la confianza en el Poder Judicial. Hay dudas de que nos comportamos como verdaderos jueces de una democracia republicana. La solución requiere entonces que revirtamos esta percepción y, para ello, los jueces debemos mostrar, todos y todos los días, que sí somos verdaderos jueces de una democracia republicana
"Nuestras decisiones no pueden ser ad hoc sino que deben están estructuradas por principios. Significa también que estamos comprometidos, en casos futuros, a aplicar esos mismos principios aunque el resultado sea impopular o antipático. Significa que, como Ulises, somos capaces de atarnos al mástil de la legalidad. Como yo lo veo, este es el punto central para recuperar confianza y legitimidad
"Hay dudas de que nos comportamos como verdaderos jueces de una democracia republicana. La solución requiere entonces que revirtamos esta percepción y, para ello, los jueces debemos mostrar, todos y todos los días, que sí somos verdaderos jueces de una democracia republicana
"Tenemos que entender que pertenecer al Poder Judicial no es un privilegio. Ser jueces o funcionarios del Poder Judicial no nos confiere derechos sino que, por el contrario, nos impone deberes y responsabilidades
"Es imposible recuperar la confianza ciudadana con logros aislados y la constancia es algo que nos cuesta a los argentinos, cualquier claudicación será vista como una confirmación de que en los jueces no se puede confiar. Por ello, mostrar que solo decidimos en base a la Constitución y las leyes requiere que todos los jueces seamos coherentes todo el tiempo, en todos nuestras decisiones. Y para ser coherentes todo el tiempo debemos pagar un precio alto pues debemos estar dispuestos a vivir con la falta de popularidad de algunas de nuestras decisiones pueden generar. Sabemos que no todo lo que la Constitución o las leyes establecen es popular o cae bien
"Hemos impulsado hace unos meses la creación de un software para analizar los datos. La semana pasada publicamos los primeros resultados en la web de la Corte al os que todos pueden acceder. Es la primera vez que la Corte hace esto y por esa razón el análisis de las estadísticas que presentamos es todavía rudimentario. Examina el flujo de las causas y el tiempo que demora su tramitación, el promedio de causas sentenciadas y discrimina las razones que la Corte emplea para resolver
"En definitiva, es indispensable hacer lo que se necesita para tener un Poder Judicial sujeto a procedimientos reglados que constituyan estándares de evaluación objetiva de nuestra acción. Eso es lo primero que debemos hacer para sortear la crisis de confianza que enfrentamos. Pero eso no es todo. Para recuperar la legitimidad debemos hacer algo más.