21 Julio de 2015 08:27
La buena producción de Martín Lousteau en las elecciones por la Ciudad de Buenos Aires le trajo más de un dolor de cabeza a Mauricio Macri. La UCR y la Coalición Cívica, integrantes del frente Cambiemos, reclamarán mayor participación y quieren replantear la estrategia de campaña de cara a las elecciones de octubre. Por su parte en el macrismo creen que la fórmula radical podría crecer y puertas adentro cuestionan al asesor estrella de Macri, Jaime Durán Barba, por “cerrarse” en el amarillo y no dar lugar a las demás fuerzas.
En la UCR y la CC consideran que el
Cambiemos se resumió sólo al PRO.
La armonía que hasta el momento reinó en el frente opositor que quiere arrebatarle el sillón presidencial a Daniel Scioli podría acabar. La UCR y también la CC-ARI, de Elisa Carrió, encendieron las alarmas de alerta luego de la ajustada victoria de Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad. El 9 de agosto los espacios competirán en la interna que definirá el candidato a presidente de Cambiemos y luego irán juntos a las presidenciales.
Elisa Carrió integra Cambiemos junto a Macri, a quien criticó con dureza en el pasado.
En la CC-ARI y la UCR creen que Macri debe ajustar las tuercas de su estrategia presidencial e incorporar en mayor medida a todos los sectores del espacio. “Nosotros consideramos que Ernesto Sanz es el más capacitado y tiene cualidades que a Macri le faltan”, explicó a BigBang Hernán Rossi, legislador porteño de la UCR.
Los tres pre candidatos mantendrán encuestros esta semana pare delinear detalles de campaña.
Los radicales aseguran por lo bajo sentirse “a un lado de la campaña”. Todos los cañones de las críticas apuntan al asesor de Macri, el ecuatoriano Durán Barba. “Su estrategia es que el PRO gane todo sin ayuda, pero se olvida que somos un Frente opositor”, explicó una fuente de la CC.
Macri aspira a ser el candidato elegido por la gente en la PASO.
La elección porteña dejó tranquilo al PRO. Del análisis de Durán Barba se desprende que el “macrismo ganó bien” y fue el propio asesor quien afirmó que “ahora es momento de propuestas más sólidas”. A pesar de esto, para la UCR y la CC la estrategia debe ser otra, más federal, en la que los tres precandidatos tengan el mismo protagonismo.
“Durán Barba sólo quiere mostrar a Macri y no le interesa ni Sanz ni Carrió. Creo que es bueno poder mostrar a los tres. La Argentina no es sólo Buenos Aires”, contó una fuente de la CC. Y es justamente en el espacio de Carrió donde la preocupación gira en torno a que el macrismo busca utilizar la ciudad de Buenos Aires como su principal bastión electoral y en esa estrategia consideran que “Lilita perdería terreno”.
Luego de las elección porteñas, Sanz incrementó su intención de voto.
Efecto Lousteau
El efecto Lousteau preocupa al PRO. Estiman que la intención de voto de Sanz se incrementará tras la buena tarea de ECO en la Ciudad. “Ahora se dieron cuenta que que podían sacar un buen caudal de votos”, afirmó un diputado nacional del macrismo.
Ernesto Sanz junto a Lousteau el domingo pasado. Ambos celebraron los buenos resultados.
Una victoria de Macri en las PASO preocupa a los integrantes del radicalismo. “Si en la interna gana Sanz, la UCR va a integrar al PRO y la CC a la campaña, pero si se impone Macri, ellos van a ir por su cuenta y nos van a dejar de lado”, explicaron.
Los conflictos podrían recrudecer esta semana luego de las reuniones pactadas entre los tres precandidatos a presidente. Allí el PRO transmitirá que su estrategia de campaña no se modificará demasiado aunque “están dispuestos a escuchar a los demás espacios”.
Las tensiones habían comenzado con el armado de los spots publicitarios. La idea original era confeccionar publicidades en la que aparezcan los tres candidatos pero el secretario general de Gobierno, Marcos Peña, y Durán Barba dieron por tierra con esta opción.