09 Junio de 2015 17:21
Para las centrales sindicales opositoras el paro de hoy fue "contundente" y advirtieron con llevar adelante "más movilizaciones", mientra el Gobierno sostuvo que se trató de un paro político, ya que se realizó en medio de un periodo preelectoral.
El jefe de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, dijo que la medida de fuerza fue "contundente" porque tuvo una "adhesión muy importante", lo que "demuestra una disconformidad con la política que aplica el Gobierno con los trabajadores".
El paro afectó el servicio de colectivos, trenes y subtes, la actividad aeroportuaria, de estaciones de servicio, peajes, Tribunales, recolección de residuos, y la labor en escuelas y bancos, que se vieron afectados por las dificultades en el transporte.
Moyano hizo un balance positivo de la protesta.
Partidos de izquierda y organizaciones sociales cortaron hoy el tránsito en puentes y accesos a la Capital y otras zonas del país, y se manifestaron en el microcentro porteño, lo que generó dificultades para quienes querían ir a trabajar en sus coches.
Durante una conferencia de prensa en la sede de Azopardo Luis Barrionuevo consideró que la presidenta Cristina Fernández "viene agrandada" porque el papa Francisco "la recibió cinco veces" y advirtió que "si no hay respuesta" al a los reclamos, "se viene el sexto paro" contra el Gobierno.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, minimizó los efectos del paro, que fue la segunda protesta nacional en lo que va del año, al expresar que los dirigentes sindicales "van a tener que sentarse mañana a discutir de nuevo" sus condiciones salariales en las paritarias.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, calificó al paro como "político" por producirse "en pleno período electoral" y consideró que si hubiera funcionado el transporte público, "la gente hubiera ido a trabajar", mientras el titular de la cartera de Trabajo, Carlos Tomada, dijo que fueron "pocos dirigentes" los que impulsaron la protesta y ponen "palos en la rueda".
El gobernador bonaerense y precandidato presidencial del oficialismo, Daniel Scioli, sostuvo que el de hoy fue "un día triste y amargo" por el paro y advirtió que "no deben anteponerse cuestiones políticas sobre el interés nacional".
Scioli se quejó de los "piquetes irresponsables" que "bloquearon el derecho a trabajo", sostuvo que el Gobierno "ha hecho un gran esfuerzo para poner en marcha el país" y subrayó que Argentina "necesita responsabilidad social".
El ministro de Interior y Transporte y precandidato presidencial oficialista, Florencio Randazzo, acusó a los "dirigentes sindicales opositores" de haber "decretado" la "prisión domiciliaria de millones de argentinos".