11 Noviembre de 2022 10:09
Gabriela Cerruti es, sin dudas, una experta en equivocarse y volver sobre sus pasos. Casi que podría llegar a tener una maestría por eso. Su último paso en falso lo dio hace pocos días atrás, cuando vinculó al memorial en homenaje a las víctimas del COVID-19 con “la derecha argentina” mientras -como si fuera poco- realizaba una recorrida por la Casa Rosada con la ministra de Igualdad de España, Irene Montero.
Pero para tomar dimensión de la torpeza de la vocera presidencial, primero hay que aclarar que el 16 de agosto de 2021 los familiares de las victimas por Covid-19 realizaron la “marcha de las piedras”, una movilización que buscaba recordar a sus seres queridos brindándoles un homenaje en Casa Rosada. Dicho homenaje, además, cuestionaba l Gobierno por la mala gestión de la pandemia que incluyó el retraso en la compra de vacunas Pfizer y las fiestas en Olivos durante la cuarentena estricta. Con este, y todavía muy reciente, antecedente, a Cerruti no se le ocurrió mejor idea que decir: "Después del Covid la derecha ha puesto sus piedras recordando a los muertos del covid”.
El pedido de renuncia se fue replicando con el correr de las horas. Tal fue la repercusión y la magnitud que el hashtag “Renunciá Cerruti” se transformó en la primera tendencia de la red social en la Argentina. "Sólo pido respeto ante tanto dolor”, reclamó Natalia Berti, quien perdió su madre, Liliana, el 22 de diciembre de 2020. “Los dichos de Cerruti lastiman mucho. Las heridas no sanaron. Cada piedra representaba a cada argentino que no pudo ser cuidado ni ser velado y enterrado”, agregó. También acusó a Cerruti de tener “poca memoria” y remarcó: “Nosotros estábamos encerrados y ellos festejaban. Violaron cada uno de los DNU. Espero que pida perdón por sus dichos. No guardo rencor, solo un gran dolor”.
Visiblemente golpeada por los dichos de la autoritaria vocera, la mujer aseguró que no pudo besar a su mamá por última vez ni tirar "un puñado de tierra en su ataúd" por culpa de la pandemia y la posterior cuarentena obligatoria. "Ni siquiera sé si la persona que ocupa su parcela es ella. La piedra representa su alma. Sólo pido respeto ante tanto dolor”, concluyó angustiada. Frente a esto, a Cerruti no le quedó otra que volver en sus pasos y salir a disculparse con los familiares de la víctima. Y si, Gabi. En volver sobre tus dichos sos una experta. “Lamento profundamente si algún familiar de víctimas del covid que ha homenajeado a sus seres queridos dejando simbólicamente piedras, se sintió ofendido por mis palabras", escribió.