29 Mayo de 2024 15:46
Mientras el presidente Javier Milei se encuentra de gira en Estados Unidos en una recorrida por Silicon Valley y estallando de emoción por exposición en la Institución Hoover de la Universidad de Stanford, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (CFK) usó la lapicera virtual para expresar su postura sobre la crisis del gas y arremeter en contra de las políticas que buscan reducir a su mínima expresión al Estado.
A través de su cuenta oficial de X (antes Twitter) dijo irónicamente: Con superávit dibujado (en mi barrio le dicen trucho) y sin gas en el caño", dijo y recordó: "Durante el gobierno del Frente de Todos, en autocrítica online, mencioné como un problema el de los funcionarios que no funcionaban".
Asimismo hizo un fuerte paralelismo con la realidad que se presenta mientras gobiernan Las Fuerzas del Cielo: "Con el actual gobierno, al problema de funcionarios que tampoco funcionan (porque no saben o no entienden) se le ha sumado uno infinitamente más grave: el de las ideas que no funcionan, combo letal en materia de gestión estatal".
CFK no da el brazo a torcer y pese a quien le peses, sigue expresándose en redes sociales de manera vehemente: "La idea que plantea la gestión del ultraderechista de "¡superávit fiscal o muerte!, como todo dogma (excepto los de la fé), está destinada al fracaso", dijo contundente.
Mientras Milei dejaba a Sam Altman, creador del Chat GPT en Estados Unidos, desde Argentina Fernández de Kirchner arremetió: "La paralización de obras absolutamente complementarias pero imprescindibles (léase compresores) al gasoducto Néstor Kirchner (auténtica obra pública estructural) bajo el slogan para redes de 'no hay plata', revelan la falta de conocimiento o la confusión que hay en torno al concepto de gasto público"
El relato de Cristina va en línea con lo que dijeron desde el sector productivo del GNC: el desabastecimiento se debe a la mala gestión libertaria. Juan José Carbajales, vicepresidente de ENARSA dijo: "Hubo un problema con el pago, la Secretaría de Energía no consiguió los dólares del Banco Central entonces envió una carta de crédito a Petrobras que fue rechazada y el buque no descargó".
Sobre esta línea, CFK explicó en pocas palabras la desinteligencia libertaria: "Ese gasto es en realidad una inversión porque permite que el Estado evite gastos mayores posteriores", dijo y profundizó: "Pruebas al canto sobre funcionarios e ideas que no funcionan. Por no girar fondos a las contratistas que estaban ejecutando las obras de los compresores por alrededor de 40 millones de dólares tuvieron que contratar buques por montos muy superiores", expresó sobre el gobierno de Javier Milei.
Pero ¡hubo más!: "Hasta acá la idea no funcionó, pero además, cuando calcularon los buques que tenían que comprar, los funcionarios calcularon mal o no tuvieron previsión. Lo dicho: con funcionarios que no funcionan más ideas que tampoco funcionan... nada puede salir bien", dijo bastante clara Cristina.
Un showman en la Rosada
La expresidenta había descripto el desembarco de Milei a la política como "un showman" en la Rosada. En esa misma línea, analizó: "No voy a hacer ningún comentario sobre la ausencia del Presidente en estos momentos tan complicados, por estar de gira artística en el país del norte".
Recordando su propio texto, terminó: "Ya lo habíamos caracterizado el 14 de febrero en nuestro documento 'Argentina en su tercera crisis de deuda': un showman en la Rosada".
Ese texto fue el primero en el que CFK analizó la gestión libertaria y también definió a Javier Milei: "El nuevo Presidente se declara libertario, anarco capitalista, enemigo del Estado, seguidor de la escuela económica austríaca -corriente de pensamiento que no aplica en ninguna parte del mundo-, su propuesta central durante la campaña electoral fue ajuste y dolarización y sostiene que la principal causa de la inflación es la emisión monetaria para financiar el déficit fiscal".
En es oportunidad Cristina Fernández de Kirchner también dijo: "Califica al gobierno de la convertibilidad, a Carlos Menem y a Domingo Cavallo como el mejor gobierno, el mejor Presidente y el mejor ministro de Economía de la historia y pretende reeditar privatizaciones, aperturas indiscriminadas y desregulaciones sin reparar que el mundo que recibió a Carlos Menem como presidente nada tiene que ver con el actual".