En medio de la polémica por las clases presenciales en la Ciudad de Buenos Aires, tras el fallo de la Justicia Porteña, el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta decidió no seguir al pie de la letra las medidas sanitarias impuestas por el Gobierno Nacional en medio de la segunda ola de coronavirus que afecta principalmente al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y mientras los hospitales porteños entran en colapso día a día.
En ese contexto, y mientras las autoridades de Juntos por el Cambio continúan con la puja política en medio del aumento de casos, en el Gobierno Porteño realizaron un plan con cuatro escenarios educativos posibles, a partir de los que se irá reduciendo o no la cantidad de alumnos en las escuelas cuando sea necesario.
El documento oficial, al que tuvo acceso BigBang, fue realizado con reducciones porcentuales de personas que asistan a los centros educativos. Aunque no informa cuáles son las condiciones que tienen que darse para pasar de un escenario a otro, ni tampoco a partir de qué cantidad de contagios se llevaran a cabo los diferentes cambios. Tampoco aclara cuáles serán las medidas sanitarias que se llevarán a cabo en los establecimientos.
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Sin acatar el DNU dictado por el Gobierno de Alberto Fernández ordenó la suspensión de clases presenciales por dos semanas, hasta el 30 de abril, y tampoco el fallo de la Justicia Federal; Rodríguez Larreta y sus especialistas en Educación y en Salud organizaron en el Escenario 1, tal como lo llamaron, la continuidad de las trayectorias pedagógicas y concretar el egreso de los estudiantes.
De esa forma, se explica en el documento, los alumnos de maternal, inicial, primaria y secundaria, y las prácticas del nivel superior tendrán clases presenciales, aunque con menos alumnos por establecimiento. En tanto, el Centro de Acompañamiento a la Trayectoria Educativa (CATE), seguirá funcionando los sábados.
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En ese contexto, habrá un total de 603.048 jóvenes en las escuelas, unos 152.658 menos que los 755.706 chicos que asisten actualmente, lo que representa una reducción del 21% de los chicos en las escuelas. También se calcula que unas 58.482 personas dejarán de utilizar el transporte público, ya que va a haber padres que no tendrán que llevar a sus hijos a clase.Para definir las características de esta etapa, las autoridades porteñas tomaron en cuenta la autonomía de los jóvenes y adultos, y la influencia de este rango etario en los contagios. Por último, la Educación de adultos, la Formación Profesional y el nivel superior universitario y no universitario continúan en modo virtual.
En tanto, en el segundo escenario, la Ciudad dispone de una reducción del 33% de personas. Por eso, 506.634 personas continuarían yendo a las escuelas. Y el documento señala que los que cumplirán con la presencialidad serán los sujetos que integran los niveles maternal, inicial, primaria y los que realicen prácticas del nivel superior.
Pero, en este punto se incorporará "la bimodalidad para los estudiantes de mayor autonomía". De esa manera, los estudiantes del secundario contarán con clases presenciales como remotas. Con esa decisión, las autoridades porteñas esperan que utilicen el transporte público cerca de 277.527 individuos, es decir, una reducción de 106.054 personas.
En el tercer escenario se dará prioridad a la presencia en las escuelas de los alumnos con menos autonomía. Y en el documento se explica: "Se priorizará la asistencia a las aulas de los alumnos de menor autonomía, tanto para el desarrollo de las actividades de aprendizaje, como para requerir el cuidado permanente de personas adultas".
Como en el escenario anterior, la bimodalidad será para los jóvenes que se encuentren en el nivel secundario. Y se agregarán los estudiantes del 2do ciclo de la primaria. Así que 425.437 chicos de la Ciudad deberán seguir yendo presencialmente. Eso es una baja del 44%. Con esa decisión, los padres y chicos que usarán el transporte público rondará el número de 242.318, una reducción de 141.263 personas.
En el último punto, el documento al que tuvo acceso BigBang pone en evidencia el peor de los escenarios. En ese sentido, los contagios de coronavirus serían muy altos en la Ciudad, pero el gobierno de Rodríguez Larreta continuaría con la presencialidad en las escuelas.
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En dicho punto, el Gobierno Porteño permitiría que 205.536 niños sigan bajo la modalidad presencial en los centros educativos. ¿Quiénes concurrirán? Será para todos aquellos estudiantes que estén transitando el cambio de un nivel a otro, es decir, los que están en maternal, los de sala de 5; los de 1°, 2° y 7° grados de primaria; los del primer año de secundaria y los del CATE.
Y detalla: "En el primer ciclo los niños y las niñas comienzan el desarrollo de la alfabetización inicial, que permitirá sostener sus trayectorias educativas en la educación formal y más allá de ella". El gobierno de Rodríguez Larreta explica que hará revisiones de los horarios de ingreso y egreso, y se deja en claro que "todas las escuelas permanecen abiertas para garantizar tareas pedagógicas y administrativas".
En tanto, el resto de los niveles de enseñanza obligatoria, la educación de adultos, la Formación Profesional, el Superior universitario y no universitario en todas sus modalidades mantendrán las clases virtuales. En ese sentido, habrá una disminución de alumnos y alumnas de un 73%. En tanto, el trasporte público será usado por 84.296 personas, entre padres y niños.