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Política

¿Cómo que nadie sabía nada? La historia de la actualización del protocolo para aborto no punible

Cerca del presidente saliente todavía no logran explicar cómo no estaban al tanto.

21 Noviembre de 2019 15:24
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Que cambia el protocolo, que no cambia el protocolo. En las últimas horas la Casa Rosada vivió un ida y vuelta permanente por la decisión del secretario de Salud, Adolfo Rubinstein, de modificar el protocolo de Interrupción Legal de Embarazo (ILE). Es que luego de la publicación, ayer, en el Boletín Oficial de la actualización rápidamente se desató una mini rebelión en la administración del presidente saliente Mauricio Macri que implicó además que altas autoridades de la Unión Cívica Radical (UCR) peguen un grito en el cielo.

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La encargada de confirmar la marcha atrás, después de una serie de especulaciones, fue la ministra de Desarrollo Social,  Carolina Stanley, que en declaraciones a la prensa manifestó que el Ejecutivo prepara una resolución para derogar la actualización en el protocolo. “El protocolo va a ser derogado porque fue una decisión inconsulta del secretario de Salud”, manifestó la funcionaria.

Antes de esa decisión, y desde ayer por la mañana, los cruces entre los miembros del oficialismo estuvieron a la orden del día. Dentro del radicalismo los primeros que pusieron el grito en el cielo ante la posibilidad, en ese entonces, que se dé marcha atrás con el protocolo fueron los que se apuntan como el ala de mayor peso después del 10 de diciembre en el centenario partido. Uno de los primeros fue el hombre fuerte de la UCR en la Ciudad, Emiliano Yacobitti, quien vía Twitter sentó su postura.

Incluso llegó a participar el ex presidente del radicalismo y miembro fundacional de Cambiemos, el ex senador mendocino Ernesto Sanz. “Sólo le dimos a entender a Macri el error de dar marcha atrás”, le contó a BigBang uno de los interlocutores. La defensa de Sanz para con Rubinstein además tiene una explicación además de compartir postura con respecto a la ILE: él fue quien lo recomendó en el cargo.

Una de las críticas que empieza a ganar mayor peso en el radicalismo además es el de la oportunidad perdida, ya que consideran que era una medida para quedar bien parados de cara a la salida del Gobierno. En el PRO cargaron contra el secretario de Salud a quien acusaron de “querer sobresalir”.

El debate en la Cámara de Diputados sirvió para que varios de los miembros de la bancada oficialista firmaran una nota dirigida a Macri, donde le solicitaban que no diera marcha atrás con el protocolo. “No va a impactar en nuestro funcionamiento de bloque, pero sí sirve para sentar bases para lo que viene después del 10 diciembre, porque tenemos que aprender a ser oposición como Cambiemos”, le dijo a este medio una de las caras visibles en el Congreso de la legalización del aborto.

¿Nadie leyó las resoluciones?

Mientras tanto los ojos también se posaron en el secretario de Legal y Técnica, Pablo Clusellas. Es que la resolución de la Secretaria de Salud de hoy, en donde se extendió la cobertura total del tratamiento para cambio de sexo, había sido enviada junto con la del protocolo ILE. “Las resoluciones se mandaron juntas y en la Secretaría decidieron darlas de esa forma”, sostuvo una calificada fuente gubernamental.

Esto quiere decir que en la dependencia que controla Clusellas estaban al tanto de los documentos que contaban con la firma de Rubinstein. No obstante ello, la propia Stanley manifestó que “se enteró por los medios” lo mismo que el propio presidente Macri y el jefe de Gabinete, Marcos Peña. “Debe estar más preocupado por el nombramiento en la Auditoría General de la Ciudad que otra cosa”, sostuvo una voz crítica a Clusellas ayer por la tarde ante el escándalo que se generó.

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Es que el secretario de Legal y Técnica fue incluido sobre el filo del cierre en la lista de candidatos para el organismo colegiado que se encarga de controlar, ex tempore, al Ejecutivo porteño por pedido directo de Macri lo que generó fuerte rechazo dentro de la Ciudad debido a que había una puja por dos de los tres lugares que le corresponden al PRO.

Un dato no menor es que el enfrentamiento entre sectores de la UCR y el PRO -que en principio no alcanzaría para generar una división terminal dentro de Juntos por el Cambio- se da justo en el momento en el que deben negociarse cargos de peso, como es el caso de la presidencia de la Auditoría General de la Nación,  a la que aspira el ex candidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto.

Mientras tanto, nadie le pidió la renuncia al secretario de Salud, ni tampoco se la aceptarían. "No es momento para hacer quedar a nadie como mártir, ni como héroe", afirman.