17 Septiembre de 2017 14:10
Después de la repercusión por la nota que brindó ante Luis Novaresio, Cristina Kirchner pone primera y retoma su campaña cargada de "mística peronista" con un multitudinario acto en el parque municipal de Florencio Varela, distrito amigo en el que sacó el doble de votos que el candidato de Cambiemos, Esteban Bullrich.
Si bien el kirchnerismo espera una convocatoria de 20 mil personas, lo cierto es que se demoró tres horas el inicio del acto por falta de gente. Una vez con el predio repleto, la ex presidenta hizo un ingreso "de estrella" al escenario, mucho menos modesto que el del lanzamiento de las PASO.
Después de saludar al público y de desfilar por el escenario en "T", Cristina revoleó una remera que le dieron y saludó a los intendentes y ex funcionarios que se hicieron presentes. Luego, le dio lugar a su compañero de fórmula, Jorge Taiana.
Las frases más fuertes del discurso de CFK
"Salud y educación, son dos pilares de cualquier política nacional, popular y democrática".
"Quiero recordar que ayer se cumplieron 41 años de un hecho muy dramático, La noche de los lápices. Diez jóvenes platenses, uno de ello lo conocí mucho porque fue compañero de mi hermana en el Colegio Nacional, Claudito Acha. Diez jóvenes desaparecidos en una argentina que no perdonaba que los jóvenes participaran en político".
"Por eso, quiero en momentos muy especiales, en donde otros jóvenes, en otros tiempos y tal vez en otros lugares están discutiendo su participación en una reforma educativa, en su derecho a decidir qué colegio quieren, qué van a hacer cuando lleguen a quinto año. Escuché a muchos decir que no quieren que, por ser estudiantes de la escuela pública, ser condenados a la flexibilización y al trabajo barato. Me conmueve".
"Es bueno también saber que dentro de 35 días, el 22 de octubre, se eligen dos cosas. Una, si el tercer senador de la provincia va a ser Jorge Taiana o Gladys González".
Destacó su "reconciliación" con Taiana.
"Jorge, su historia, su vida, su participación. Su compromiso. También su sufrimiento. Fue durante años preso de la Dictadura. Canciller de Néstor y después en mi Gobierno. Por ahí nos peleamos un poquito, pero después nos amigamos".
"Esto para que vean que no soy rencorosa, ni él antepone sus intereses a los del conjunto. Algo de eso que muchos recitan. Nosotros no recitamos, nosotros lo llevamos a la práctica. Lo militamos, lo comprendemos, porque son convicciones profundas. Es simple".
"Esto no es soberbia, ni arrogancia. Es el resultado del 13 de agosto, cuando la gente claramente posicionó a uno y a otros. Saldando discusiones estériles y dándonos la razón en algo: es mucho más importante en estos momentos, más que discutir entre aquellos que pensamos igual y podemos tener algunas diferencias, construir una oposición serie, firme y concreta, frente a un modelo que ha agravado las cosas".
"Después de octubre se viene el gran ajuste", disparó.
"Hay momentos, sobre todo en esta elección y con todo lo que estamos viviendo, es necesario deponer diferencias. ¿Saben por qué? Si hasta ahora tuvimos una primera fase del ajuste, se viene después de octubre el gran ajuste. Lo saben todos y todas".
"Se sabe que todos los aumentos fueron pospuestos. También se sabe, porque les llegaron las facturas de gas, que lo dividieron en cuatro cuotas. En la Argentina siempre se compró en cuotas cuando se podía, pero heladeras, televisores, una casa. Tener que pagar en cuotas el gas, la luz o la cuenta del supermercado no es bueno".
"Desde el 10 de diciembre, la deuda externa a crecido a una razón de 164 millones de dólares por día. Seis millones, ochoscientos mil dólares por hora. Osea, si acá llevan dos horas, ya debemos trece millones o un poco más todavía".
"Podríamos haber hecho 471 satélites, 1.600 escuelas públicas y podría seguir. Porque alguien me hablaba de soberanía y tiene razón, porque los aumentos, la precarización laboral, los despidos, los cierres de fábricas, de comercios; son una dimensión si se quiere material".
"Cuando un país recibe a un vicepresidente de un país muy importante (por el de Estados Unidos) y al otro día te cierran las importaciones del biodiesel".
Cristina señaló el incremento de la deuda externa.
"Miren cómo estaremos. Se acuerdan cuando en Arsenal comentábamos que habían desorganizado la vida de la gente, ¿se acuerdan? Han pasado ya unos meses y lo que estoy observando es que ahora vienen por otra cosa. Vienen por la precarización, que es algo más que malas condiciones de trabajo".
"La precarización es algo más que un mal salario. La precarización es el temor, el mido, la inseguridad permanente de que te pueden sacar el trabajo y entonces aceptás cualquier condición que te pongan".
En medio del discurso, el público le advirtió a la ex presidenta que se había perdido una nena. "¿Cómo se llama? Paola. Por favor, ¿dónde está paola?", indagó desde el centro del escenario. Segundos después, tras la aparición de la chica, chicaneó: "Acá no se pierde nada y menos los chicos".
La ex presidenta cuestionó el tweet de Carolina Stanley.
"La incertidumbre es el peor estado de ánimo. No saber qué te va a pasar. Cuando uno lee testimonios de gente que estuvo detenida y desaparecida. Ese sufrimiento, hay un hilo común y conductor. Más que el miedo a morir, era el temor a no saber lo que podía pasar".
"Piensen un poco. Vivir permanentemente con la espada de Damocles sobre la cabeza con el miedo a quedarse sin trabajo, es disciplinador en la sociedad".
"Me di cuenta cuando ayer publicitaron algunas fotos increíbles, como poniendo ejemplo de gente que ha caído del aparato productivo y puso una parrilla pobre en la puerta de su casa para subsistir (en alusión al polémico tweet de Carolina Stanley). Cómo una fuerza política puede poner esto como ejemplo, si la obligación de todo Gobierno es la de generar trabajo. Increíble".
El polémico tweet que publicó y luego borró Stanley.
"Pensar que decían que nosotros no éramos un Gobierno de empresarios. Es cierto. Pero nunca se abrieron tantos comercios, ni tantas industrias en las últimas décadas. Nunca se generaron tantos millones de puesto de trabajo. Tanta gente que pudo abrir un comercio o ampliar su fábrica".
"Este Gobierno que es un Gobierno de empresarios nunca vio que se cerraran tantas fábricas, tantos comercios y se despidieran a tantos trabajadores. La política de un país no depende de la profesión del que es presidente, sino de las convicciones que ese presidente tenga".
Cristina y la desaparición de Santiago Maldonado
La ex presidenta también se refirió al joven artesano de 28 años, que fue última vez visto con vida el primero de agosto, en el marco de un operativo de desalojo encabezado por la Gendarmería. "Hoy tenemos que volver a preguntar dónde está un ciudadano que no aparece".
"Hoy tenemos que volver a preguntar dónde está un ciudadano que no aparece".
Mientras el público coreaba un "Santiago, ¿dónde está?", Cristina prosiguió: "La verdad, les voy a decir lo que pienso. No sería honesta si no lo dijera. He sido presidenta durante ocho años y cuando ha habido hechos conmocionantes le he hablado a la ciudadanía. Porque un presidente es, además, la voz que todos esperamos. No importa si lo votamos o no lo votamos. Esperamos su voz sobre un hecho que conmociona a la sociedad. Eso también es ser republicano y democrático".
"Mi opinión podría ser como la que ellos tuvieron cuando yo era es presidenta: es responsable de todo. Si llueve es culpa de Cristina. No voy a hacer igual. No sólo porque no hago lo que no me gusta que me hagan a mí, pero por sobre todas las cosas es que creo que lo que ha pasado aquí es que las autoridades políticas soltaron la mano de las fuerzas de seguridad o dan mensajes para abajo que se traducen en 'meter preso a un pibe' un mes porque escribió un tweet".
"Cuando se empiezan a meter en los Facebook para ver lo que pensás. Cuando te empiezan a mirar el Twitter. Me hacen acordar a los que te agarraban la agenda en los allanamientos para ver a quién más se podían llevar. No es democracia, es precarización de los derechos, de las libertades".
Cristina llamó a un diálogo "público nacional".
"No quiero ni trabajo precarizado, ni democracia precarizada. Quiero trabajo para los argentinos. Si lo hicimos en medio de dificultades y lo sostuvimos en medio de la crisis más importante global de la que se tenga memoria, ¿cómo no lo vamos a poder hacer?".
"Estamos dispuestos a un diálogo público nacional para discutir los grandes problemas de los argentinos. Porque sabemos que esta es una elección parlamentaria. Queremos que cambien el rumbo, porque la grieta que tanto preocupa a algunos, es la grieta social, económica y de derechos que se está produciendo".
"No se puede seguir estigmatizando al que piensa diferente. No se puede considerar enemigo a quien cree que los trabajadores tienen que tener sus derechos. No se puede pensar que es un mafioso el que defiende el derecho a manifestarse".
"No quiero vivir en un país en el que la gente tiene miedo de salir a la calle. No quiero vivir en un país en el que la gente vuelva a ver a los efectivos de seguridad como enemigos y no como servidores públicos".
"Quiero volver a vivir en un país en el que la democracia es sólo un ejercicio discursivo. En el que trabajar es un privilegio y no un derecho. El trabajo es un derechos de todos y de todas".
Por último, la ex presidenta le habló directo al electorado: "Lo que vaya a pasar después de octubre no sólo es responsabilidad de candidatos o dirigentes. Es también responsabilidad de la sociedad en su conjunto. Si están dispuestos a darle un cheque en blanco al Gobierno para que siga con el ajuste".