Cristina Kirchner regresó hoy a los Tribunales de Comodoro Py 2002 para defenderse una vez más de los delitos que se le imputan. Esta vez, rechazó la "descabellada" acusación de haber lavado dinero junto a Máximo y Florencia y cobrado coimas de Lázaro Báez, Cristóbal López y Fabián de Sousa en el marco de Los Sauces. Pero en el último año, la ex presidenta debió explicar su rol en el "Dólar Futuro", Hotesur y el reparto de la obra pública.
La nube de palabras en el universo judicial de CFK.
Entre todas sus presentaciones, con la asistencia de los abogados Carlos Beraldi y Gregorio Dalbón, Cristina repitió varias palabras, además de las básicas de cualquier texto, que demuestran la construcción de un discurso en el que relaciona directamente las causas en su contra con el avance del gobierno de Mauricio Macri en su ajuste de la economía.
Cristina piensa que la mejor defensa es un buen ataque.
Recusación, (Milagro) Sala, devaluación, (Mauricio) Macri y (Mario) Quintana, son las palabras base de su hipótesis: que la Justicia en realidad debiera investigar la evolución de los contratos a dolar futuro desde la asunción del actual presidente, quien permitió en su primera semana de gestión una devaluación del 41%, por la que se benefició entre otros su vicejefe de Gabinete.
Por eso, insistió Cristina en sus escritos, la detención de la líder de la Tupac Amaru fue una manera de intentar "tapar" el ajuste del macrismo. En ese contexto, había solicitado el viernes la eximición de prisión de su hija ante el juez federal Claudio Bonadio para que pudiera declarar en Los Sauces sin miedo a ser detenida. Política total ante la Justicia.