18 Septiembre de 2020 16:13
El jueves, por orden del juez federal de Tres de Febrero, Juan Manuel Culotta, se llevó a cabo un allanamiento en "Los Abrojos", donde vive actualmente Mauricio Macri, para acceder a las cámaras de seguridad del lugar y determinar si el ex mandatario violó la cuarentena tras su regreso de Europa.
El ex presidente se reunió el pasado 10 de septiembre con los intendentes Martín Yeza, Francisco Ratto y Ezequiel Galli cuando aún no habían pasado los 14 días de la cuarentena sanitaria que debía cumplir tras haber regresado de su viaje por Francia y Suiza.
Pero si bien fueron muchos los intendentes de Juntos por el cambio que criticaron esta medida, desde el Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires acusó al propio Macri de haber organizado un "autoallanamiento" en su quinta para "desacreditar al peronismo".
A través de un comunicado, el PJ bonaerense sostuvo que Macri acordó la movida con el juez Culotta, al que señalan como ex alumno del colegio Cardenal Newman, el mismo al que asistió el ex mandatario, el allanamiento a su quinta para colocar al peronismo "en la vereda de la persecución y la intolerancia".
"Los peronistas no andamos con gorra y uniforme soplándole a la Justicia infracciones o delitos de nuestros oponentes, a quienes les damos pelea en la discusión de ideas y en las urnas", señala el texto, difundido por distintos dirigentes de la oposición.
En ese sentido, el escrito afirma que el magistrado "fue designado, en forma irregular, como juez electoral durante la gestión de Cambiemos para ejercer el control político directo de las elecciones de aquel año" y aclaran que no fue el municipio de Malvinas Argentinas el que realizó la denuncia contra Macri.
Cabe destacar que la medida fue solicitada por el fiscal federal Jorge Sica, quien tiene en sus manos la investigación iniciada a partir de la denuncia de la Secretaría de Seguridad de Malvinas Argentinas.
El fiscal había reclamado primero al municipio de Malvinas Argentinas que le proveyera los registros de las cámaras de seguridad de la zona, pero recibió como respuesta de la subsecretaria de Seguridad municipal que en ese lugar solo hay cámaras de seguridad privada.
La Delegación San Martín de la Policía Federal allanó el jueves el sector de seguridad de la quinta "Los Abrojos" y retiró una copia de las imágenes tomadas por las cámaras del lugar el 10 de septiembre pasado.
En ese momento, Macri no se encontraba en su quinta y estaba pasando el día en su casa de la localidad bonaerense de Olivos. Otra de las pruebas judiciales que pidió el fiscal fueron informes a la Dirección Nacional de Migraciones para conocer las fechas de egreso e ingreso de Macri al país.
A pesar de esto, el intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, sostuvo que "jamás he radicado una denuncia ante este hecho como se informó en algunos medios".Al mismo tiempo, el PJ bonaerense remarcó que el peronismo sufrió en los últimos años una persecución política, poniendo de ejemplo a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner: sobre ella "descargaron todo el odio oligárquico y mendaz a través de jueces y fiscales prevaricadores".
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Finalmente, advirtieron que este "autoallanamiento" se trató de una maniobra de Macri para mejorar su imagen electoral, luego de que las últimas encuestas muestren que fue superado Horacio Rodríguez Larreta.
"Lamentamos que la interna de la oposición comience a dirimirse mediante maniobras judiciales que buscan oxigenar el liderazgo decrépito de alguien que no se resigna a aceptar que otros dirigentes de su espacio sean más valorados que él", concluyó el comunicado.
El escrito viralizado por el PJ de la provincia de Buenos Aires fue compartido, además, por la propia ex presidenta, quien utilizó sus redes sociales para definir el allanamiento contra Macri como "fake (falso)". "Esclarecedor comunicado", sentenció.
