Los empresarios Cristóbal López y su socio Fabián De Sousa quedaron en libertad esta tarde, luego de que el juez Claudio Bonadio aceptara la solvencia de las garantías por la fianza de $60 millones que ordenó para cada uno. Días atrás, la Cámara Federal porteña había ordenado la excarcelación de ambos, del mismo modo que un tribunal que los está juzgando.
Bonadio aceptó la garantía de las dos fianzas que estableció en $60 millones para cada uno, lo que demoró la salida de los dos empresarios debido a que tienen sus bienes inhibidos en el marco de las causas por presuntos hechos de corrupción y evasión. Si bien la Sala I de la Cámara Federal y el Tribunal Oral N° 3 habían ordenado las excarcelaciones, Bonadio mantenía las prisiones preventivas en la llamada causa “Cuadernos de las coimas”.
Los dos empresarios estaban alojados en la cárcel de Ezeiza. Sus abogados presentaron ayer a la tarde el seguro de caución en la sede del juzgado, pero como no había personal la decisión se demoró hasta esta mañana en la que el magistrado ordenó la liberación de los dos empresarios.
Desde la cárcel de Ezeiza fueron trasladados hasta dependencias de la Policía Federal situadas en Madariaga y la avenida General Paz. Hasta allí llegó el ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández, abogado de López en alguna de las causas que se le iniciaron.
De esta manera, López y De Sousa recuperaron la libertad luego de dos años de prisión preventiva en el marco de diversas causas por supuestos hechos de corrupción. Fueron detenidos en diciembre de 2017, aunque meses después, en marzo de 2018, recuperaron la libertad por un mes, gracias a un fallo de la Cámara Federal porteña que luego fue revocado por la Cámara de Casación Penal. Por lo cual en abril de 2018 fueron detenidos nuevamente.
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LAS CAUSAS POR LOS QUE SON INVESTIGADOS
El expediente central por el que continuaban tras las rejas era la causa de los cuadernos, iniciada a partir de las anotaciones de Oscar Centeno, el chofer del ex secretario de obras públicas Roberto Baratta. Allí fueron acusados por lavado de dinero con un departamento ubicado en el barrio porteño de Recoleta, y por negociados vinculados a la obra pública. En esta causa, son los únicos que quedaban detenidos, luego de que la semana pasada fuera excarcelado el dueño de Electroingeniería, Gerardo Ferreyra.
Semanas atrás, el Tribunal Oral Federal N° 3 había ordenado la liberación de los empresarios en la causa “Oil Combustibles”, donde están siendo juzgados por haber hecho una transferencia irregular de las acciones del Grupo Indalo cuando se encontraban inhibidos para hacerlo.
Como sus bienes se encuentran inhibidos, debieron presentar seguros de caución como garantía por los $60 millones ordenados por Bonadio. Los abogados de López, Fabián Lértora, y de De Sousa, Carlos Beraldi, hicieron las presentaciones días atrás para finalizar con el trámite judicial y lograr la libertad de sus clientes.