Luego de las declaraciones de Alberto Fernández, en las que se preguntó cuál habría sido la respuesta oficial del Gobierno si los muertos por la represión y el estallido social en Chile hubieran sido en Venezuela, desde el Ejecutivo salieron con los tapones de punta contra el candidato presidencial del Frente de Todos: en especial la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, el senador nacional Miguel Ángel Pichetto.
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“Una cosa es la protesta social y otra el nivel de violencia y destrucción de la protesta. Eso no se puede aceptar en ninguna democracia. Lo que pasa en Chile no es una protesta social, eso es una insurrección con carácter cuasi terrorista", sostuvo hoy temprano Bullrich en declaraciones a Radio Mitre.
"¿Qué hubiera dicho (Mauricio) Macri si esto pasaba en Venezuela? El aumento del subte hizo salir la bronca contenida de un montón de cosas. El ajuste es el denominador común, una política económica que castiga a los sectores más débiles”, dijo Fernández ayer por la noche en C5N.
Y ante esto, Bullrich insistió: "El mismo Alberto Fernández compara una democracia como la de Chile, donde necesariamente tenía que salir el Estado a poner orden, con un régimen dictatorial que cerró el Parlamento y la Justicia".
Pichetto fue aún más duro y apunto directamente contra Venezuela y Cuba, tal y como manifestó la OEA por la violencia en Ecuador, a quienes culpó de los estallidos sociales. “Hay un proceso de desestabilización en la región con injerencia venezolana-cubana”, denunció Pichetto y aseguró que “la dictadura militar en Venezuela, en sociedad con Cuba, está avanzando en otros países de Latinoamérica”.