La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) detuvo esta mañana por orden del juez Marcelo Martínez de Giorgi a los principales referentes de la agrupación de ultraderecha Revolución Federal, entre ellos a su líder, Jonathan Ezequiel Morel.
Los otros dos detenidos en el marco de la causa que investiga las amenazas de la agrupación, y que se encuentra bajo secreto de sumario, son Leonardo Franco Sosa y Gastón Ezequiel Ángel Guerra.
A Morel lo detuvieron en su casa de la localidad de Munro, a Sosa en Villa Ballester y a Guerra en Moreno. Además hubo otros ocho operativos más en la Capital Federal y en la provincia de Buenos Aires. En uno de estos se allanó la sede de la empresa vinculada al ex ministro macrista Luis Caputo, Caputo Hermanos.
Desde la firma se habían presentado ayer de forma voluntaria ante la Justicia, ante los rumores que ya anunciaban los operativos que hoy solicitó el fiscal Gerardo Pollicita, en la misma causa donde aceptaron como querellante a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner anteayer.
La investigación de Martínez de Giorgi es por amenazas e inicialmente la tuvo su colega María Eugenia Capuchetti pues se acumuló con el expediente donde se investiga el atentado con arma a la vicepresidenta en inmediaciones a su domicilio el 1° de septiembre pasado y por lo cual hay detenidas cuatro personas, la denominada "banda de los copitos" por vender copos de azúcar en la vía pública.
Pero finalmente, la jueza dijo no encontrar elementos de prueba que vinculen a la "banda de los copitos" con esta otra causa que investiga a Revolución Federal por amenazas.
La investigación que se inició por denuncia de la Agencia Federal de Inteligencia es por amenazas dirigidas a la vicepresidenta vía redes sociales, pero también audios intercambiados en una transmisión en vivo realizada el 26 de agosto de 2022 por el grupo Revolución Federal a través de la plataforma Twitter Space que fue convocada con el título "¿Hay que pudrirla?".
Al igual que en el expediente del atentado que tiene Capuchetti, la Vicepresidenta está convencida que estos grupos no actuaron por si solos sino que fueron financiados y hay alguien detrás que nunca fueron descubiertos ni aún alcanzados por la investigación. Por eso, la causa por el atentado avanza en ese sentido con cuatro detenidos que están a las puertas de ir a juicio, pero el expediente intenta determinar si recibieron financiación por parte de alguien.
Según fuentes judiciales, es probable que se realicen más allanamientos en las próximas horas y no se descartan más detenciones.
Con información de Noticias Argentinas