En el perfil de su cuenta de Twitter, Silvina Batakis se define como “federal, peronista y fanática de Boca”. Sin embargo, no deben haber sido estas características las que llevaron a Daniel Scioli a elegirla como su futura ministra de Economía en caso de ganar las elecciones.
Silvina Batakis, la elegida de Scioli para Economía.
Nacida en Río Grande hace 45 años, y egresada de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata, la actual ministra de Economía bonaerense -ocupa ese cargo desde 2011- ha sabido comandar varias de las principales crisis del gobernador, tanto en lo económico como en lo político.
Diplomada con un máster en Finanzas públicas provinciales y otro en Economía ambiental de la Universidad de York, Inglaterra, obtuvo diversas becas en el exterior y se capacitó en Francia, Inglaterra y Chile.
Fanática de Boca, pura sonrisa durante un encuentro con Carlitos Tévez.
Antes de su llegada al ministerio fue directora provincial de Economía Ambiental y Energías Alternativas, directora de Zonas Francas, jefa de asesores del Gabinete de ministros y subsecretaria de Hacienda. Además, es cofundadora del Centro de Estudios Federales (CEFED), que presidió en diferentes períodos.
Hasta su llegada al ministerio, no tenía demasiadas aspiraciones políticas. Sin embargo, a partir de su llegada al cargo comenzó a tomar cada vez más protagonismo, y en más de una oportunidad debió mostrar cintura política a la hora de esquivar los ataques del Ejecutivo nacional por las cuentas provinciales.
Comprometida con su función, le ha puesto el cuerpo a los conflictos de la provincia con los gremios, a tal punto que hasta resultó herida en una pierna cuando en marzo pasado un grupo de 50 personas atacó a los representantes del ejecutivo provincial con golpes y piedras en medio de la negociación con los docentes.
Cultora del bajo perfil, seguramente más de uno debe haber tenido que recorrer a Google para ver de quién se trataba cuando el candidato del FpV hizo el anuncio.
Sin embargo, por sus antecedentes se perfila como una mujer de armas tomar, condición fundamental para un cargo clave en el armado de cualquier estructura de gobierno.