Mientras que la historia recuerda a algunos presidentes de la Argentina por sus logros y proyectos políticos concretados, el caso del saliente Alberto Fernández parece que va camino a ser muy distinto. Si bien a él le gusta excusarse a través de la pandemia, la sequía y la guerra ruso-ucraniana, sus grandes hitos parecen estar más vinculados a los bloopers que cometió que a los éxitos que concretó durante su gestión.
Si bien para muestra con un botón alcanza, BigBang repasó las salidas más controvertidas y más viralizadas que tuvo en su mandato, para comprobar y exponer la afirmación. Y la evidencia es tan abundante como sorprendente.
Así fue que el 9 de junio de 2021, durante un encuentro empresarial entre España y Argentina, "El Beto" lanzó una de las máximas que más lo iba a inmortalizar. "Escribió alguna vez Octavio Paz: los mexicanos salieron de los indios, los brasileros salieron de la selva, pero nosotros los argentinos llegamos de los barcos". La frase real era "los mexicanos descendemos de los aztecas, los peruanos de los incas y los argentinos de los barcos", pero él dijo la otra sin ponerse colorado y frente al presidente español Pedro Sánchez, a quien se ve que tanto no le molestó, porque justamente Fernández suena como su posible y futuro asesor.
Casi un año después, la confusión que tuvo respecto al nombre de la publicación Garganta Poderosa también fue un viral muy exitoso. "Ahí veo al compañero de Garganta Profunda", expresó durante un anuncio que dio. Luego se corrigió, pero hasta llegó a aprovechar el error para llevar agua para su molino. "Pero profunda también, porque la verdad es que nos enseñaban en esas revistas otras cosas que eran ocultas por otros medios", señaló, con el objetivo de que el furcio tenga algún sentido.
Si bien en aquel momento se le intentó dar un sentido más metafórico, lo cierto es que en enero de 2021, tras promulgar la ley de interrupción voluntaria del embarazo (IVE) ofreció una de sus declaraciones más polémicas: "Estoy muy feliz de estar poniéndole fin al patriarcado, es una gran injusticia que se ha vivido durante siglos". Más allá de la exageración de la afirmación, lo más tremendo es que en la última semana de gestión les informaron a los contratados del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades que "quedaban sujetos a la aprobación del presupuesto y a la voluntad de la nueva gestión". Es decir, en la calle.
Tras probablemente el escándalo más grande que atravesó su gestión, conocido como vacunatorio VIP, y que se trató de las inmunizaciones de Covid-19 que les ofrecían a personas importantes y cercanas al poder, un año después llegó algo peor: el hecho de que se conociera que mientras millones estaban aislados de forma obligatoria, en la Quinta de Olivos el mandatario y su pareja Fabiola Yañez festejaban cumpleaños con invitados.
Aunque lo peor no sería eso. Cuando el desastre político explotó y salió a la luz, durante una conferencia de prensa, en vez de hacer una autocrítica por lo sucedido, directamente le echó la culpa a la madre de su hijo más pequeño. "Mi querida Fabiola convocó a un brindis con amigos que no debió haberse hecho", sintetizó, sin ponerse colorado, y sin hacerle frente a las críticas recibidas.
Probablemente este sea uno de los hitos más marcados del presidente saliente, y justamente fue uno que lo marcó para siempre en su gestión. Es un hecho que en una de las últimas entrevistas que brindó, a días de dejar el poder, le echó la culpa a todos los demás de sus errores, fundamentalmente a su vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el tironeo político que protagonizaron ambos.
En este contexto es que es difícil entender el balance que hacía de sí mismo él, y también algunos periodistas y comunicadores. En abril de 2023 pasó por el programa El Mañana que conduce Mex Urtizberea y el humorista le preguntó quién debía interpretarlo en el caso de que se realice una película biográfica de él. "Robert de Niro", contestó el entonces presidente. La respuesta generó todo tipo de reacciones, aunque la gran mayoría osciló entre la lástima y la bronca.
Durante un encuentro de presidentes sudamericanos quiso elogiar a Evo Morales, aunque la reflexión que soltó, generó mas rechazos que adhesiones. "Lo que ocurre en Bolivia es que hay una clase dominante que no se resigna a perder el poder a manos de un presidente boliviano que es el primero que se parece a los bolivianos. Eso es todo lo que pasa", reflexionó.
Los errores fueron algo que lo acompañó desde comienzos de su mandato y que lo signó desde aquel entonces. El 30 de diciembre de 2019, justo a 20 días de su asunción, presentaba el Plan Nacional de Lecturas (PNL) en un acto en el Museo de la Casa Rosada. Allí expuso un alto nivel de ignorancia respecto a probablemente el autor más importante que haya nacido en la Argentina.
"Una vez leí el poema de Borges Las causas, publicado en las páginas de Cultura de La Nación y, desde entonces, pienso que su poesía es maravillosa, aunque se lo suele reconocer por sus novelas", destacó Fernández. Lo cierto es que Jorge Luis, no escribió ninguna novela en su extensa carrera, ya que sólo compuso cuentos, poemas y ensayos.
Este "premio nobel que no fue", y que dirigió la Biblioteca Nacional durante 18 años, era más que reconocido por sus frases y reflexiones. Una de ellas decía: "Uno llega a ser grande por lo que lee y no por lo que escribe". En el caso del presidente saliente, ni una cosa, ni la otra. Sólo la sombra de una gestión que no estuvo a la altura de las expectativas de su electorado, tanto para quienes lo votaron como para quienes nunca lo hicieron.