Desde la medianoche comenzó el primer paro general de la CGT contra el Gobierno de Mauricio Macri. A pesar de que desde la central obrera habían pedido no movilizar, las organizaciones de izquierda realizan una serie de cortes y piquetes en distintos puntos de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
A pesar de que desde el Gobierno impulsaron una serie de medidas para que aquellos que quieran asistir a sus trabajos puedan hacerlo, lo cierto es que trasladarse será complejo, no sólo por la adhesión de los gremios del transporte, sino por las movilizaciones anunciadas en los accesos a la Capital Federal y en el interior de la Ciudad.
De todos modos, ayer la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, confirmó que se enviarán efectivos de las fuerzas con el objetivo de desalojar las protestas que impidan la circulación vehicular. De hecho, tanto en el Puente Pueyrredón como en Panamericana y ruta 197 había desde temprano un fuerte operativo de Prefectura y Gendarmería, respectivamente.
Por otra parte, el Gobierno porteño liberó el tránsito y se podrá circular y estacionar como un domingo o feriado, sin que operen los parquímetros ni que se realicen multas a quienes dejan los vehículos en la mano izquierda en calles y avenidas donde habitualmente no se puede. Tampoco se cobrará peaje.
Además del Puente Pueyrredón y Panamericana y 197, habrá movilizaciones en los principales accesos de la Autopista Buenos Aires- La Plata. Los manifestantes bloquearán el tránsito en la autopista del Oeste a la altura del Hospital Posadas y en General Paz y Constituyentes.
Los cortes de tránsito comenzaron desde las 6 de la madrugada.
Por otro lado, se preven cortes en el Obelisco, así como movilizaciones que podrían ser sorpresivas en otros puntos de la Capital Federal. Cerca de las 11 de la mañana, los manifestantes intentarán hacer un corte frente al Hotel Hilton, en Puerto Madero, sede del Foro Económico y Social, en donde estará Mauricio Macri junto a gran parte de su gabinete. También habrá movilizaciones frente al Centro Cultural Kirchner.
EL PARO
Lo concreto es que la medida de fuerza, a la que se sumaron los principales sectores gremiales, tiene alto acatamiento. El principal aliado de la huelga son los sindicatos vinculados al transporte: durante todo el día no habrá ni colectivos, ni trenes, ni subtes.
El Sindicalismo combativo junto al @PTSarg/@Fte_Izquierda en Panamericana y Km 197 #ParoNacional https://t.co/WawOrQEjaf vía @lulahlois pic.twitter.com/dwZO5CsbLj
- Marcela Soler (@PTSPrensa)
Los taxis que circulan son los particulares y no se observaron muchos en las últimas horas, sobre todo a partir de la amenaza - y luego retractación - del titular del sindicato de peones de taxis, Omar Viviani, que habló de “dar vuelta” los autos de los choferes que salgan a trabajar.
En el ámbito educativo, tanto público como privado, la actividad estará paralizada, no sólo por la dificultad de los docentes y alumnos para llegar, sino también porque hoy es la segunda jornada de paro docente en el ámbito de la provincia de Buenos Aires anunciada para esta semana.
En el caso de los hospitales, sólo funcionan las guardias médicas mínimas. La recolección de residuos también se verá afectada, por eso desde los distintos gobiernos pidieron a los vecinos no sacar la basura. Los bancos tampoco abrirán. Los aeropuertos tampoco estarán operativos debido a la medida de fuerza, aunque aterrizarán los vuelos que partieron el miércoles y tienen previsto aterrizar hoy.
La CGT anunció la medida de fuerza luego de la marcha del 7 de marzo pasado.
Se trata de un paro más que esperado por los sectores de la CGT más críticos de la gestión de Mauricio Macri: es la primera medida de fuerza que se lleva a cabo desde que asumió, en diciembre de 2015. Pero además, la primera huelga que realiza la central desde que asumió la nueva conducción tripartita, con Juan Carlos Schmid, Carlos Acuña y Héctor Daer a la cabeza.