02 Agosto de 2024 14:23
Las palabras de la diputada nacional por La Libertad Avanza (LLA) Lourdes Arrieta, respecto a que desconocía quién era el represor condenado Alfredo Astiz, luego de haber ido a visitarlo junto a otros cinco legisladores libertarios a la Unidad 31 del Penal de Ezeiza, parecen cada vez menos creíbles. Es que su padre, Tomás Arrieta, fue cabo primero en la Guerra de Malvinas, y cuenta con denuncias por haber torturado y hambreado a los soldados que condujo.
"Yo el 25 de mayo de 1982 fui sacado de la primera línea por desnutrición. Este señor, Arrieta, me sacaba la comida", reveló el último jueves el ex combatiente Rubén Ponce de León en diálogo con Escuchá Página 12 por la 750. "Nuestra comida en Malvinas consistía en un desayuno, a eso de las 10 u 11 de la mañana, y un almuerzo, que también era merienda y cena, tipo cuatro de la tarde. Eran dos comidas por día. Y como todos pasábamos por la misma situación, Arrieta no encontró mejor forma de castigarme que persiguiéndome", añadió el correntino.
"Una vez me encontró durmiendo, cuando estaba de guardia, y me castigó sacándome el desayuno y el almuerzo. Siete soldados a cargo de Tomás Arrieta fuimos replegados de la primera línea, todos en las mismas condiciones de desnutrición", detalló en las declaraciones radiales.
La situación es mucho más grave en el caso de Secundino Antonio Riquelme, otro correntino conducido por el ex cabo primero, quien murió por desnutrición un día antes de que a Ponce de León lo den de baja, en el hotel de campaña que se ubicada en la Pradera del Ganso, cerca de la localidad isleña identificada como Ganso Verde. "Un día después tomaron la decisión de replegar al puesto de sanidad a todos los que estábamos en las mismas condiciones", precisó la persona que volvió de la Guerra con 48 kilos.
La quita de alimentos no fue el único castigo indefendible que realizó el jerarca militar, padre de la diputada libertaria. También torturó haciendo estaquear -es decir atando las extremidades a cuatro estacas en el suelo- por lo menos al soldado Mario Oscar Núñez. Junto a Ponce de León, ambos realizaron la presentación judicial por lo que sufrieron, aunque esta no avanzó. "Hice la declaración y nunca más me citaron", confesó.
"Tomás Arrieta debería dejar de percibir la pensión honorífica que cobramos los excombatientes, como castigo por lo que hizo en Malvinas, porque es un hijo de la gran pu**", sentenció el correntino. "Cuando regresé al continente, la gente se reía de mí, porque era hueso nomás. Ese día yo estaba con mis padres, y cuando regresamos al regimiento de Mercedes, de donde soy yo, Arrieta se les acercó y les dijo: 'Yo le salvé la vida a su hijo'", contó. "Qué me va a salvar la vida, si me sacó la comida ese atorrante. Pero bueno, en los momentos difíciles se ve qué clase de persona sos", cerró.