Un teléfono que está registrado a nombre de José López, ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo, mantuvo 40 llamadas entrantes y salientes durante las 24 horas previas al escándalo en el monasterio de General Rodríguez, donde el ex funcionario intentó ocultar bolsos con casi US$ 9 millones.
El celular de López mantuvo 40 llamadas durante las 24 horas previas.
Según pudo determinar la Justicia, dos de esas comunicaciones se realizaron hacia un teléfono fijo del monasterio de Nuestra Señora de Fátima y otras dos, hacia el celular de la hermana Alba, la monja que habría tenido un contacto con López minutos antes de ser detenido.
El teléfono que registró las 40 llamadas, según una testigo, era utilizado por su esposa, Amalia Díaz. La testigo agregó que el 13 de junio, es decir un día antes del episodio, se comunicó con ella y que la mujer del ex funcionario le dijo que estaba peleando con su marido.
A las 3.16 de la madrugada del 14 de junio, López habría hablado con su esposa.
Las comunicaciones efectuadas por el teléfono durante el día previo a su captura permitieron trazar un recorrido de ese aparato hasta 45 minutos antes de que López fuese sorprendido con el dinero en sus manos.
Ese análisis permitió determinar que a las 3.16 del 14 de junio, en la madrugada en la que López fue detenido, desde el teléfono que supuestamente era utilizado por su esposa se efectuó una llamada saliente a uno de los dos aparatos que el funcionario tenía dentro del vehículo Meriva cuando quedó preso. La justicia cree que esa comunicación se efectuó entre López y su esposa.
La última llamada se produjo minutos antes de ser capturado.
Ahora la investigación deberá determinar si el teléfono era efectivamente utilizado por la esposa y, en tal caso, verificar cual fue el contenido de esas llamadas para comprobar o desechar la posibilidad de una posible complicidad.
Mientras tanto, el fiscal Federico Delgado pidió a las empresas telefónicas y a la Comisión Nacional de Telecomunicaciones las llamadas entrantes y salientes de todos los celulares de López. Por su parte, el juez Daniel Rafecas aún aguarda por el análisis de los fajos de los billetes secuestrados para poder determinar la procedencia del dinero.