11 Marzo de 2025 08:25

El presidente Javier Milei firmó el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 179/2025, mediante el cual se establece un nuevo Programa de Facilidades Extendidas con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La medida, publicada en el Boletín Oficial, busca cancelar parte de la deuda del Tesoro con el Banco Central de la República Argentina (BCRA) y afrontar los próximos vencimientos de créditos tomados con el organismo internacional en el marco del acuerdo de 2022.
El decreto establece que las operaciones de crédito público tendrán un plazo de amortización de 10 años, con un período de gracia de 4 años y 6 meses. Según el artículo 1°, los fondos obtenidos se destinarán exclusivamente a cancelar letras intransferibles en dólares en poder del BCRA, priorizando los vencimientos próximos, y cubrir pagos de deuda relacionados con el acuerdo de 2022 con el FMI. Desde la Casa Rosada justificaron la urgencia del decreto argumentando la necesidad de fortalecer la posición financiera del BCRA, reducir restricciones cambiarias y continuar con la política de disminución de la inflación.
El Gobierno remarcó que al asumir en diciembre de 2023, el país enfrentaba una situación crítica, con una inflación interanual del 211,4%, un nivel de pobreza del 54,8% y reservas netas del BCRA en -USD 11.200 millones. En este contexto, la gestión implementó un severo ajuste fiscal y medidas de estabilización, logrando reducir la inflación mensual al 2,2% en enero de 2025 y disminuir la pobreza al 38,9%. El BCRA también aumentó sus reservas en más de USD 7.000 millones, aunque el Gobierno considera necesario sanear su balance mediante esta operación para garantizar estabilidad financiera y levantar el cepo cambiario.
La firma del decreto permite al Ejecutivo sellar el acuerdo con el FMI sin necesidad de la aprobación de ambas cámaras del Congreso. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, tiene diez días hábiles para remitir el DNU al Poder Legislativo, donde la Comisión Bicameral Permanente deberá evaluar su validez. Si el decreto no es rechazado por ambas cámaras, quedará vigente. Desde la oposición y sectores económicos críticos, se sostiene que el DNU podría contradecir la "ley Guzmán" de 2021, que establece que cualquier acuerdo de financiamiento con el FMI debe ser aprobado mediante una ley del Congreso.
Para el Gobierno, en cambio, el decreto tiene fuerza de ley, por lo que no existirían inconvenientes jurídicos para avanzar. Según fuentes oficiales, el acuerdo ya cuenta con el visto bueno del FMI. El presidente Milei argumentó que la operación no incrementará la deuda total del país, ya que se trata de un canje de "deuda vieja por deuda nueva", lo que permitiría restaurar el patrimonio del BCRA y consolidar el proceso de desinflación. No obstante, la iniciativa enfrenta un panorama político complejo. Mientras que en Diputados el oficialismo confía en reunir los votos necesarios, en el Senado se espera una fuerte oposición del bloque kirchnerista, que podría trabar la medida.
En este escenario, el Gobierno apuesta a que el DNU se mantenga vigente por falta de rechazo en ambas cámaras, despejando vencimientos de corto plazo y avanzando en su estrategia económica.