De un tiempo a esta parte, la plata de la corrupción comenzó a regresar a las arcas del Estado. Por estas horas, se conoció que dos ex funcionarios de la Casa de la Moneda devolverán $1.343.265 que obtuvieron a partir de una maniobra irregular en el Poder judicial durante el menemismo.
Dos ex funcionarios de la Casa de la Moneda devolvieron dinero robado.
Se trata de Juan Carlos Kalfaian, ex vicepresidente de la Casa de Moneda, y Rubén Chorbadjian, condenados por el pago de sobreprecios entre 1994 y 1999 a una empresa alemana. El dinero luego volvería a sus propias cuentas.
Este ejemplo es tan sólo uno de los casos en los que ex funcionarios se vieron obligados a devolver dinero proveniente de irregularidades en la función pública. Los ex ministros Domingo Cavallo (Economía) y Raúl Granillo Ocampo (Justicia), también debieron devolver $ 220.868 y $ 1.350.000, respectivamente, por los sobresueldos que cobraron.
El ex ministro de Economía debió devolver dinero por sobresueldos.
A ellos se suma el caso de Felisa Miceli, la ex ministra de Economía de Néstor Kirchner condenada a tres años de prisión por el dinero hallado en el baño de su despacho. Como el dinero quedó en manos de la Justicia luego del allanamiento, no debió entregar la plata. Algo similar podría ocurrir con el caso de José López, ex secretario de Obra Pública, quien fue detenido con un bolso con 9 millones de dólares. Si es condenado, el dinero pasará a ser del Estado.
Por otra parte, tres ex funcionarios de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) que tras la finalización del gobierno K decidieron llevarse una millonaria indemnización -prohibida por ley-, devolvieron el dinero a pesar de que ni siquiera se inició un proceso legal en su contra.
El recibo de sueldo de uno de los ex integrantes de Yaciretá.
El ingeniero Daniel Muguerza regresó a la entidad $3.328.842, mientras que el ex director ejecutivo, Oscar Thomas, hizo lo propio con otros $4.000.000, mientras que el asesor legal, Sergio Santiago, también decidió devolver los fondos.
En un caso inédito, el intendente de la localidad entrerriana de Larroque, Dario Benedetti, de Cambiemos, decidió devolver al ministerio del Interior de Rogelio Frigerio más de 13 millones de pesos de un presunto sobreprecio que detectó en una obra pública que ejecutada por su antecesor, Raúl Riganti, del Frente para la Victoria, y financiada por el Estado nacional.
El intendente que devolvió el dinero.
El Gobierno había girado ese monto a Larroque para terminar pagar la inversión total de 21 millones de pesos que costó la pavimentación de 14 cuadras en el pueblo de 8 mil habitantes. El municipio debía transferir ese monto a la empresa contratada OIC S.A, pero el dinero quedó en una cuenta del municipio en el Banco Nación, mientras culminaba la auditoría para analizar los números de la gestión del intendente saliente, Raúl Riganti, del Frente para la Victoria.