Luego de una mañana caliente en la que los vecinos de Villa Lugano fueron reprimidos por cortar la Autopista Dellepiane tras estar cuatro días sin suministro eléctrico, el ministro de Economía, Sergio Massa, le presentó al presidente Alberto Fernández un informe sobre la distribuidora Edesur, elaborado por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), a partir del cual se evalúa la intervención de la empresa privada.
El responsable de la cartera económica llegó a la Casa Rosada a las 11:14 y se retiró a las 13:50. Según fuentes cercanas al Poder Ejecutivo, una de las propuestas que evalúan es la de realizar una intervención de gestión sin afectación de capital, lo que implicaría una propuesta totalmente alejada a la idea de expropiación que circula entre muchos de los usuarios afectados por la falta de servicio.
Con un fin de semana donde hubo más de 42 mil clientes de Edesur y Edenor sin luz en toda la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), y en el marco de una ola de calor fuertísima que golpeó a toda la región, el interventor del ENRE, Walter Martello, fue el primero que el lunes deslizó la idea de tomar medidas un poco más firmes que las multas de todos los años contra la distribuidora.
"Dada la grave situación y conforme lo indicado por Secretaría de Energía y el examen técnico que formularemos, actuaremos en consecuencia por la posible caducidad de la concesión del servicio de distribución eléctrica a cargo de la empresa Edesur", escribió Martello en su Twitter.
La secretaria de Energía, Flavia Royón, también se expresó a principios de la semana. "Tenemos reportes que cientos de familias llevan días sin electricidad. Tienen una cosa en común, son todas clientes de Edesur. Acabo de instruir al ENRE para que inicie las actuaciones administrativas correspondientes para solucionar de forma inmediata, y definitiva, este tipo de situaciones que se repiten año tras año", reconoció la funcionaria.
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La situación a nivel social llegó a un punto límite hoy con los fuertes enfrentamientos que protagonizaron los vecinos con los efectivos de la Policía de la Ciudad que fueron a reprimir el corte. Los habitantes de distintos barrios de monoblock de Lugano, como Copello, Nájera, Savio y Samoré, además tienen el problema de que las bombas no están funcionando y tampoco se llenan los tanques de agua que hay en sus terrazas.Desde el Poder Ejecutivo estarían evaluando la desbordada situación de hoy como un límite a la realidad de la distribuidora, la cual todos los veranos demuestra que no logra contener los problemas de suministro eléctrico.
Mientras que en este momento Edenor cuenta con 2.005 usuarios sin energía, las cifras de Edesur llegan a los 18.751. Una diferencia de casi 10 veces más, que expone la antagónica calidad de vida que se vive en el sur y en el norte del AMBA.