Lejos de los escritorios y más cerca de la gente. Ese es el concepto básico de la estrategia comunicacional del macrismo en la que se intenta humanizar en su máxima expresión a cada uno de sus funcionarios.
En esa búsqueda, desde Cambiemos intentan mostrar a las mujeres que integran el Gobierno de Mauricio Macri más cerca de los ciudadanos, y para lograrlo, la esposa del Presidente, Juliana Awada, la gobernadora María Eugenia Vidal y la canciller Susana Malcorra fueron fotografiadas realizando las compras en distintos supermercados.
Al igual que en la campaña, Awada y Vidal vuelven a mostrarse cerca de la gente.
Desde Cambiemos niegan que las fotografías se traten de montajes preparados para luego darse a conocer a través de las redes sociales. Sin embargo, una alta fuente de gobierno aseguró a BigBang que la estrategia de comunicación para humanizar a los funcionarios utilizada durante la campaña, “ahora busca sostener la sintonía con un electorado algo golpeado por las primeras medidas de Gobierno”.
Todo comenzó con la esposa del Presidente. Juliana Awada se fotografió con un cliente en el Barrio Chino mientras realizaba las compras y la imagen se viralizó por completo en las redes sociales con una alto grado de aceptación entre el público en general.
Una escena similar ocurrió con la canciller Susana Malcorra, quien fue al supermercado con un look similar al que suele utilizar en sus reuniones con representantes internacionales. Fue vista en un supermercado a dos cuadras de la Cancillería donde trabaja, en Retiro, y un vecino de la zona le tomó una foto para Twitter.
Malcorra, la canciller argentina, saca las bolsas para llevar los productos.
El último caso fue el de María Eugenia Vidal, quien en la localidad de Cariló fue fotografiada haciendo compras en un supermercado con un look muy juvenil. Allí se ve a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires con un short de jean, un buzo de la marca GAP y una mochila animal print.
Vidal fue retratada en el supermercado mientras realizaba las compras.
Su imagen se asemeja a la utilizada durante la campaña en la que logró vencer a Aníbal Fernández y en la que supo cosechar un importante vínculo con el electorado.
La Gobernadora aguarda para abonar en la caja al igual que el resto de los consumidores.
En todas las escenas se puede observar como las mujeres más importantes del gobierno de Macri respetan las normas. Tanto Juliana como Vidal fueron retratadas haciendo la cola para pagar, cuando por su condición podrían haberse ahorrado ese paso. En tanto, en el caso de Malcorra, se la puede ver abriendo las bolsas para ubicar dentro de ellas los productos. El concepto es demostrar que a pesar de sus altos rangos y sus privilegios, los funcionarios se sienten como un ciudadano más.
Macri juega con la pequeña Antonia en la intimidad de su despacho.
A estos casos, se suma la estrategia de mostrar a Macri junto a su hija Antonia en ámbitos de trabajo como su despacho en la Casa Rosada. Una forma sencilla y directa de mostrar al Presidente como un padre de familia más. Una estrategia que también intenta demostrar que los funcionarios tienen los mismos problemas que la gente, aunque sean ellos quienes deban intentar resolverlos.