15 Noviembre de 2016 17:32
El triunfo de Donald Trump cayó como un balde de agua fría para el gobierno nacional y fue recibido con optimismo en el bunker del Frente Renovador de Sergio Massa. No sólo porque Mauricio Macri había apostado al triunfo de Hillary Clinton sino porque además con la victoria de Trump se reavivó la prédica contra los inmigrantes.
Siempre partidario de la mano dura, el ex jefe de Gabinete de Cristina Kirchner se subió hoy a la ola que llevó a Trump a la presidencia. "El extranjero que comete un delito tiene que ser expulsado después del cumplimiento de su condena", dijo Massa.
El triunfo de Donald Trump complicó a Macri y se festejó en el massismo.
Y agregó: "A mí no me van a correr con lo de la discriminación porque yo soy hijo de inmigrante; los dos son extranjeros (su madre y su padre), así que no me van a decir que planteo algo con un costado xenófobo. Es el estricto cumplimiento de la ley. El que comete un delito tiene que ser expulsado".
Ayer, el viceministro de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco, y hoy el jefe de Gabinete, Marcos Peña, confirmaron que el gobierno analiza dictar un decreto tendiente a reforzar los controles migratorios, tal como había trascendido por versiones periodísticas el fin de semana último.
El diputado Massa reinvidicó el trabajo del Frente Renovador en la campaña de 2013 con Rudolph Giuliani -el alcalde de la "Tolerancia Cero"- y el general Oscar Naranjo, denunciado por estimular la creación de grupos paramilitares en Colombia y México.
Massa reivindicó su trabajo con Giuiliani, el alcalde de la Tolerancia Cero.
"Es fundamental que tengamos nuestro espacio aéreo radarizado y nuestra frontera 24 horas cuidada. Pero además que apliquemos el artículo 22 del pacto de San José, que no tengamos miedo. Argentina debe expulsar, después del cumplimiento de condena, a los extranjeros que cometen delito", dijo el ex intendente.
"Argentina tiene que ser un país abierto a la inmigración del trabajo y cerrado a la inmigración del que comete delitos."