31 Mayo de 2017 17:56
Florencio Randazzo está decidido a ir a una interna en el PJ para definir el “mejor” candidato de cara a las elecciones legislativas. Lo hace, incluso, cuando sabe que se trata de una maniobra arriesgada en la que podría sufrir una contundente derrota.
Randazzo no quiere lista de unidad.
Es que el ex ministro de Transporte entiende que sea cual sea el resultado, su imagen se verá revitalizada: si compite contra el candidato que designe Cristina y gana será el líder del PJ y si pierde en manos de la ex presidenta alejará por completo los estigmas kirchneristas que lo persiguen al haber enfrentado a quien fue su jefa por más de 8 años. "La idea es mostrar lo mejor de su gestión: eficacia sin corrupción", dicen sus allegados.
"La idea es mostrar lo mejor de su gestión: eficacia sin corrupción
En este sentido, la estrategia de la campaña que coordina Alberto Fernández, es clara: mostrar a Randazzo como un ex funcionario kirchnerista que fue eficaz, medido y racional, lejos de los casos de corrupción que generan rechazo de buena parte del electorado.
Randazzo quiere transmitir que durante su gestión, "cumplió".
Tras su salida del poder, dejo de seguir a Cristina Kirchner en Twitter y a quienes formaron parte de su gobierno, en definitiva, sus ex compañeros. Además colocó como tweet fijado un video con el hashtag #Cumplimos, una palabra en plural pero que sólo resalta los logros de su gestión al frente del Ministerio de Transporte.
A pesar del hermetismo de su espacio, Randazzo mira más allá de las elecciones legislativas y busca convertirse en referente peronista sin restos de kirchnerismo en su vestimenta. De ahí que la empresa que encabezan Martín Insaurralde, Fernando Espinoza y Máximo Kirchner para intentar convencerlo de que la unidad es la mejor opción para el espacio resulta compleja.
Luego de presentar los 30 mil avales que le posibilitaran competir en las elecciones, el objetivo de Randazzo es sumar apoyo territorial a su campaña a través de intendentes peronistas, quienes le reclamaban una definición. Ayer la dio: quiere internas en el PJ. Hasta ahora, sólo cuenta con el respaldo del intendente de Bolívar, Eduardo "Bali" Bucca, su par de San Martín, Gabriel Katopodis, y Juan Zabaleta (Hurlingham).
Ahora Randazzo intentará convencer a dos que tiene cerca: Juan Pablo De Jesús (Partido de la Costa) y Mariano Cascallares (Almirante Brown), quienes apoyan la candidatura del ex ministro pero que en caso de que Cristina sea candidata se inclinarían por la jefa del proyecto. Buscarán revertir esta situación.
Su intento por alejarse del kirchnerismo es tal que, aunque en su entorno lo niegue, Randazzo mantiene contactos con el Gobierno. Pocos, pero concretos.
