Cuando todavía la Casa Rosada se encuentra en "modo vacaciones", debido a que hay algunos funcionarios clave que aún no se reincorporaron a sus gestiones, se encuentra pronto a terminarse la hoja de ruta con la que Cambiemos buscará concretar la reelección del presidente Mauricio Macri. Por ahora sólo hay diferentes puntos dispersos, pero que juntos terminan de armar el primer borrador sobre el cual se montará casi toda la campaña.
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Hablarle a los propios
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, es el caso principal del primer punto. Entre los votantes de Cambiemos es una “rockstar”; la ministra que mejor mide y la que es más es apreciada. Sin embargo, es la que ocupa el primer lugar entre las más denostada.
Es por eso que cada vez son más los funcionarios que se encuentran convencidos de que los primeros pasos de la campaña es "volver a seducir al votante de Cambiemos" y no centrarse en conseguir adhesiones de otros sectores.
“Mauricio tiene entre un 35 y 40% de intención de voto, que son los de Cambiemos. A ese le tenemos que hablar. El resto se verá cuando se defina lo que tendremos en frente”, expresó una alta fuente oficial.
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Saber que se perderán provincias, pero estar atentos a la “devolución de gentilezas”
La estrategia después de la victoria en los comicios de 2017 de buscar “mojar” en alguna provincia en 2019 que estuviera en manos de la oposición quedó como un sueño efímero. Por estos días, Cambiemos sabe que no podrá conseguir destronar a gobernadores salvo algunos casos en donde podría llegar a ser posible, pero no por eso fácil. La Rioja, Santa Cruz y La Pampa. En esas tres jurisdicciones, por diferentes motivos, los oficialismos se encuentran debilitados.
En La Rioja, el gobernador, Sergio Casas, busca llevar adelante una consulta popular para modificar la Constitución y aspirar a un nuevo mandato. Allí Cambiemos llevó el planteo hasta la Corte Suprema que analizará y fallará en breve si fue o no legal esa maniobra. En Santa Cruz la crisis económica y mala administración de Alicia Kirchner dificulta sus chances de mantener el poder y buscaría refugio en la ley de lemas que fue declarada constitucional por el máximo tribunal.
En La Pampa, la enfermedad del actual mandatario provincial, Carlos Verna, hizo que anuncie que no buscará reelegir, pero tampoco logró ungir a un sucesor lo que le abre chances a la oposición.
En el resto se buscará competir, pero a sabiendas de que el escenario es difícil. No obstante ello, en algunas provincias se buscará una “devolución de gentileza”. Todas las fichas se “las ganó” el mandatario de Santa Fe, Miguel Lifschitz, quien desde el 2015 fustiga a Cambiemos en los diferentes medios. En una campaña que tendrá la seguridad como eje el gobernador santafecino recibirá constantes recuerdos del fracaso de las políticas del socialismo contra el narcotráfico y la violencia que tienen a la provincia con el índice más alto de homicidios.
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La forma en la que se envía el mensaje
“La oposición sigue hablando un lenguaje que la sociedad ya no usa”. Con esa frase uno de los máximos encargados de la comunicación de Cambiemos expresa lo que esperan que sea uno de los puntos clave de la campaña: el lenguaje. En el entorno de Macri celebraron que el consultor ecuatoriano, Jaime Durán Barba, comience a armar el manual de interpelación de la sociedad. “Prefiero que este ahí decodificando a que se ponga hacer cuestiones de gestión. Eso me da más confianza”, agregó la misma fuente.
La tesis de Durán Barba es que la oposición todavía no consiguió hablar el lenguaje actual de la sociedad y que eso le daría una ventaja comparativa.
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La agenda mediática sin la economía en el centro
El famoso "de eso no se habla" de Cambiemos en el 2019 será la economía, después de dos años en los que se registró de una inflación de más de 40%, caída en el nivel de actividad, incumplimiento de promesas fiscales, aumento de impuestos, pérdida del poder adquisitivo, y aumentos de tarifas en todos los servicios públicos.
"El 80% de la sociedad no tiene ni idea qué es el litio, ni qué se hace en Vaca Muerta, ni las energía renovables", se sinceraron en el búnker de Balcarce 442 ante la consulta. La única certeza que tienen en el comando de campaña es que no habrá buenas noticias económicas para comunicar y que cualquier tipo de rebote será imperceptible de cara a octubre.
Incluso en varios despachos de la Rosada se sorprenden ante la falta de videos de la oposición remarcando lo que fueron las promesas incumplidas de Macri. "Sabes como los tendría ya todos viralizados si estuviera del otro lado", analizó la misma fuente.
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No subestimar la unión del peronismo
El peronismo todavía no definió si irá a una gran PASO o se mantendrán las divisiones que se sostienen desde 2013. En ese escenario de tercios es donde Macri y sus colaboradores se sienten más cómodos, pero no obstante ya comenzaron a sonar las primeras alarmas ante la eventualidad de que suceda dicha unión.
La intención de la ex presidenta y actual senadora nacional por la provincia de Buenos Aires, Cristina Fernández de Kirchner, de volver a pisar fuerte en ungir candidatos y en el armado de las listas daría la impresión de que será difícil dicha unidad y eso trajo un poco de calma en el oficialismo. "Igual no nos podemos quedar tranquilos, no hay que subestimar", sostuvo uno de los encargados de estar atento a como se desarrolla esa situación.
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Mostrar avances en obras históricas para "dar buenas noticias"
El soterramiento del Sarmiento, las represas hidroeléctricas, cloacas y redes ferroviarias, son algunos de los focos de la campaña positiva que buscará llevar adelante Cambiemos. Las obras en cuestión son menos de las que buscaban mostrar para proyectar gestión.
Sobre todo con la interna que hubo en el Gabinete que terminó con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, absorbiendo gran parte del control de la obra pública para 2019. "Tenemos que dar alguna buena noticia. Son todas pálidas y se nota", graficó uno de los históricos colaboradores del macrismo.
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Terminar el debate por el desdoblamiento
Lo que comenzó con una estrategia para recuperar la agenda mediática terminó por convertirse en un caso de estudio, para pasar a ser una posibilidad con muchas chances y ahora quedó como algo que se descartaría. Si bien Macri y la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, se encontrarán en breve para darle un punto final a la decisión todo indicaría que se enfrió con respecto a semanas atrás.
Incluso miembros de la Casa Rosada remarcan que se encargaron de darle "difusión" al tema para mantenerlo vivo en la agenda. Por ahora, salvo que la propia Vidal ponga argumentos muy fuertes sobre la mesa, todo indicaría que se avanzaría hacía la unificación de las elecciones en territorio bonaerense con las nacionales. Lo mismo pasará con los comicios porteños.
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El pedido de más presencia de Larreta
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, es visto como una de las cartas fuertes de Cambiemos y por eso le pedirán que se vuelva a convertir en una especie de "resolvedor de problemas" de cara a la campaña de 2019. La intención del comando de campaña, del que forma parte, es que tenga mayor participación en todo tipo de cuestiones.
Mientras tanto el acalde porteño se mantiene abocado 100% a la gestión y no quiere dejar nada librado al azar o fuera de su alcance de control. Si bien es un jugador de equipo, como le gusta definirse, sabe que en su mente se encuentra el desafío 2023 y que necesita una releeción de Macri para poder alcanzarlo más fácil.
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Tregua y paz en Cambiemos
Una de las máximas que Macri y su gabinete bajó para la Unión Cívica Radical y la Coalición Cívica es cortar definitivamente con el juego amigo para todo el 2019. "Nadie va a poder sobrevivir si llega a ganar Cristina", les dijo directamente el jefe de Estado a no sólo a Vidal y a Larreta, sino también a los gobernadores radicales.
Es por eso que la atención estará puesta también en como juegan cada uno sus candidatos en las PASO. En Santa Fe se vendrá el exámen más complicado. La UCR tiene dos candidatos contra uno de la CC-ARI. Mario Barletta y José Corral quieren ser quien represente al sello partidario pero no gozan de un gran conocimiento ni apoyo. Elisa "Lilita" Carrió ya tiene pensado ir a hacer campaña para su candidato, el diputado provincial Federico Angelini: dicha acción sostienen que podría hacer que se erija como el ganador de la interna lo que podría despertar la furia radical.