El presidente Alberto Fernández aseguró que su gobierno atravesó "tormentas de las peores" que ha podido superar y que se pondrá a la cabeza "para que, en diciembre de 2023, el presidente o presidenta que asuma sea" del Frente de Todos, en el marco del discurso que dio para celebrar sus tres años de gestión, en el Parque Colón que está detrás de la Casa Rosada. Las ausencias del ministro de Justicia, Eduardo "Wado" de Pedro y de su par de Economía, Sergio Massa, llamaron la atención.
Tanto la pandemia de Covid-19, como la guerra en Ucrania que tanto movilizó los mercados mundiales, estuvieron presentes en su balance, donde remarcó que "es hora de que" se pongan "en valor esos logros", rodeado de personal de Salud y trabajadores que estuvieron involucrados en la lucha contra el coronavirus.
En su intervención, el mandatario también apuntó a la crisis que desató la reunión secreta entre funcionarios porteños, jueces, fiscales y representantes del Grupo Clarín, en la estancia que el británico Joe Lewis tiene en el Lago Escondido de Río Negro, y remarcó el muro mediático que impide que se difunda la grave novedad.
"Hace una semana vemos cómo el sistema de medios puede tapar una noticia pero en realidad hace tres años venimos viendo cómo se tapan las noticias que hacen el desarrollo del país", denunció Alberto. "Para nosotros, la República es un valor. Pero tiene que funcionar bien el Poder Judicial, que no ande en el Lago Escondido sino que haga justicia", criticó después, entre los aplausos de los presentes.
"Cuando en aquel mes de mayo Cristina (Fernández de Kirchner) me propuso que fuera candidato, nunca pensé que los días que vendrían serían los que vinieron", confesó previamente Fernández. "Los dos soñábamos con poner en marcha una Argentina pujante, que estaba muy quedada, que había cerrado 23 mil empresas, que se había endeudado más allá de lo debido y creíamos que éramos capaces de revertirlos, pero no esperábamos que al día 29 cayera una pandemia", agregó.
"Cuando pasó nos cayó la mala noticia de la guerra entre Rusia y Ucrania. Y es bueno que reflexionemos porque tal vez en estos tres años pasaron muchas más cosas, hicimos muchas más cosas de las que somos capaces de dar. Y no las hizo un presidente, la hicimos todos", reflexionó.
"Muchos dicen que soy un presidente timorato", comentó Fernández, quien luego continuó diciendo que para él "el liderazgo no se ejerce gritando ni golpeando la mesa, sino convenciendo a todos".
El Presidente también profundizó acerca de los problemas en la educación, en el marco de la pandemia, cuando recordó que la Organización Mundial de la Salud les pedía que no concurran a clases hasta que la pandemia no pase.
"La pandemia fue un momento siniestro. Gobernar era pisar terreno desconocido, no sabíamos por dónde transitar porque no teníamos certezas", recordó Fernández. "Y un día apareció la vacuna y salimos enloquecidos a buscarla, y nos acusaron de mil cosas, pero empezamos a vacunar en la Argentina al mismo tiempo que el mundo central.
"Y se distribuía muy injustamente. El 90 por ciento de las vacunas quedaba en manos del mundo central y el 10 restante iba a la periferia donde estuvimos nosotros, pero aun así estuvimos entre los primeros países del mundo que empezaron a vacunar, con un plan muy exitoso", agregó el mandatario.
"En el camino muchos y muchas quedaron porque fueron los más expuestos cuando la pandemia no tenía solución", reconoció sobre las muertes en el primer tiempo. "El Covid hoy no ocupa camas de terapia intensiva porque la inmunidad es muy grande. Entre los países de más de 30 millones de habitantes, somos el que más inmunidad ha logrado entre sus ciudadanos", celebró.
Sobre la economía del 2020, recordó que se cayó como en todo el mundo, pero afirmó que mientras ese año se perdieron 9 puntos del PBI, al siguiente se creció un 10,3, y este año está por arriba del 6 por ciento, algo que -sólo por el arrastre- en el próximo año se crecerá no menos un 3.
"Desde que Néstor Kirchner se fue, en la Argentina no logramos crecer tres años consecutivos en la economía del país y lo estamos logrando entre todos y todas", festejó Fernández.
En su intervención recordó que durante los últimos tres años se entregaron 75 mil créditos a familias con terreno, pero sin posibilidades de construir, con más de 250 mil soluciones habitacionales, con 140 mil viviendas en construcción actualmente.
"La Argentina es otra, y a la que nosotros apostamos es la que pone en valor la obra pública y está muy cerca de los que menos tienen. Es por eso que, más allá de lo que escriban los diarios, nunca vamos a dejar de lado la asistencia a quien la necesite, pero vamos a hacerlo bien. No queremos que esa asistencia vaya a quien no la necesita", reconoció Fernández.
Cumbre Secreta de los jueces: allanaron la estancia de Joe Lewis en Lago Escondido
"Los países ricos no lo son porque tienen petróleo, oro, gas, cobre, son ricos porque tienen la tecnología para extraer todo eso. Por lo tanto que nosotros invirtamos en educación, conocimiento, ciencia y tecnología, estamos invirtiendo para ser un país soberano y para darle más prosperidad a la Argentina", expresó el presidente.Además, señaló que se pudo llevar adelante el plan de pagos del FMI, sin que los salarios, la educación, la ciencia y la salud se hayan visto afectados.
"Vamos a terminar este año con récord de exportaciones e importaciones, porque para seguir produciendo necesitamos insumos para la producción, para que las empresas privadas siguen aumentando su trabajo", planteó.
"Yo les garantizo a todos que me voy a poner al frente de todos nosotros sin exclusión para que, en diciembre de 2023, el presidente o presidenta que asuma sea uno de nosotros. No voy a permitir que, otra vez, los que han entregado el país y lo han puesto de rodillas, vuelvan a querer hacerse cargo de una Argentina que sólo le sirva a pocos. Voy a ponerme al frente para ordenar nuestra fuerza política, que a nadie excluya, todos tengamos lugar y seamos necesarios", declaró respecto al panorama electoral del próximo año.
"Vamos a ganar, unidos y por el bien de la Argentina", cerró su discurso Fernández, antes de que todos los presentes entonen las estrófas del Himno Nacional Argentino.