Si existe una materialización de la influencia de Milagro Sala en la sociedad y la política jujeñas, ese es El Cantri, el barrio de viviendas sociales que la activista y su organización, la Tupac Amaru, construyeron en la zona de Alto Comedero, al sur de San Salvador de Jujuy.
El Cantri, que supo ser señalado como ejemplo y hasta se hicieron documentales mostrando su crecimiento y funcionamiento comunitario, hoy está en franca decadencia. Con Sala detenida, los “tupaqueros” acusan al gobernador jujeño Gerardo Morales de no darles fondos para mantener el barrio.
El cartel de bienvenida al barrio de la Tupac Amaru
La construcción del asentamiento comenzó en el 2001 con contribuciones económicas del gobierno de Néstor Kirchner. Levantado en varias etapas, El Cantri cuenta con 6.000 viviendas, cuyos tanques de agua se distinguen por tener pintados los rostros de Juan Domingo Perón, Eva Duarte, Ernesto “Che” Guevara y, por supuesto, Tupac Amaru.
Las casas del Cantri cuentan con retratos pintados en los tanques de agua.
El modelo del diseño de las viviendas está estandarizado y fue realizado a mano por el Ministro de Viviendas. Cada hogar tiene 50 m2 que incluyen cocina comedor, baño, dos habitaciones y un jardín. Mucho menos lujosas que la mansión de la propia Sala, que hoy BigBang mostró desde un dron en exclusiva.
Además, El Cantri cuenta con iglesia, bar, escuelas, un parque, un taller textil y otro metalúrgico, y un mirador construido a la manera de un antiguo templo inca. Apenas unos años atrás, el acceso estaba vedado para personas que no vivieran allí y hasta había barreras en algunas de las esquinas, pero la restricción terminó cayendo.
Aunque ya no funcionan, las barreras aún pueden verse en algunas esquinas.
También ostenta la que probablemente sea su principal insignia: la enorme piscina decorada con estatuas de morsas y pingüinos. “Antes eran contadas las piletas acá en Jujuy y por morocho no te dejaban entrar”, le contaba al respecto Sergio Chorolque, el hijo de Milagro Sala, a radio La Red.
La piscina del Cantri era la delicia de chicos y grandes.
En la pileta también había varias actividades, como clases de aquagym.
Pero, con Milagro alojada en la cárcel de mujeres de Alto Comedero, la piscina se ha convertido en una especie de metáfora del abandono por el que transita el liderazgo del Movimiento Tupac Amaru. Luego de que el gobierno de Gerardo Morales le cortara la financiación a la organización, el espacio acuático cayó en desgracia.
Los carteles que protestan contra la quita de fondos de Morales. (Foto: La Nación)
Así, como muestra el dron de BigBang, el agua está estancada y llena de barro y musgo luego de un largo tiempo sin uso ni mantenimiento. Y en pleno verano jujeño. “A nosotros solo nos habían dado plata para las viviendas y luego de que pasaron los años se agrando la familia tupaquera. A eso hay que mantenerlo con el cloro, con varios líquidos, no es fácil”, explicó Chorolque en La Red.