01 Junio de 2018 06:20
Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica, justificó de la peor manera su postura en contra de la interrupción de embarazos utilizando un ejemplo espantoso en el que aseguró que podría "convertirse en un método anticonceptivo".
Elisa Carrió volvió a derrapar.
En diálogo con La Nación Más, la diputada nacional mantuvo su negativa sobre la despenalización del aborto seguro, legal y gratuito argumentando que se lo van a practicar a las menores violadas. "Ahora no pasa eso, tienen los hijos", dijo la referente de la Coalición Cívica, y principal aliada de Mauricio Macri, en Cambiemos.
"¿Saben lo que van a lograr con eso?", se preguntó sobre la Ley que se debatirá el 13 de junio en Diputados. Y se respondió: "A las chicas de 12 o 13 años que tienen hijos, de un hermano, de un tío, de un padre, de un patrón o del hijo de un patrón, las van a llevar al hospital para abortar legalmente".
Cuando el conductor del programa en el que estaba invitada le dijo que ahora van igualmente a abortar pero lo hacen ilegalmente, pero en condiciones insalubres, Carrió afirmó que las jóvenes no van, sino que tienen a los hijos.
La diputada recordó el denominado "derecho a la pernada". Esto era el privilegio feudal por el que los nobles tenían el derecho de abusar a las mujeres de sus vasallos. "El aborto legal es una posibilidad para lo que se llama el derecho de pernada. En el norte, cuando dictamos la ley que sancionaba el abuso, los diputados de Salta decían que no podían votar eso porque el regalo de los que sirven en el campo es la virginidad de su hija al patrón de la estancia", explicó.
Según explicó Carrió, el pedido de despenalización del aborto se trata de "un conflicto entre dos derechos y algunos misterios que la ciencia no puede develar, que es el inicio de la vida". Además dijo que la prohibición de abortar, como la prohibición de drogarse es cultural y evaluó que el aborto "podría convertirse en un método anticonceptivo".
Para terminar, desplegó su explicación sobre su postura ante el feminismo. "Soy feminista en el sentido del derecho de las mujeres a ser personas, pero no soy una feminista machista en el sentido de esta prepotencia del dominio de la mujer. Soy distinta del hombre, soy igual en derechos, pero somos distintos. No estoy con ese extremismo de algunos sectores feministas", concluyó.