El nuevo juez de la causa por la desaparción de Santiago Maldonado, Gustavo Lleral visitó por segunda vez la comunidad mapuche de Cushamen, donde se vio al joven por última vez, hace ya dos meses.
Lleral llegó hasta la Pu Lof Resistencia Cushamen, a unos 80 kilómetros de Esquel, y gracias a que se ganó la confianza de los mapuches, pudo tomarle declaración testimonial a dos de ellos.
El juez pasó más de dos horas en la comunidad y habló con los testigos -un hombre y una mujer de 25 años- en una reunión dentro de la camioneta en la que llegó hasta el lugar.
Dos meses pasaron desde la desaparición de Santiago Maldonado.
Los tres asistentes que acompañaron al magistrado también dialogaron con Andrea Millañanco, pareja del lonko de la comunidad, Facundo Jones Huala, y Elizabeth Loncopán, entre otros, alrededor de un fogón, en la casilla de guardia que se encuentra en el ingreso de la comunidad.
Lleral, quien remplazó al juez federal Guido Otranto, quien fue recusado por la querella y removido por la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia, señaló que encabezó una "negociación" con los mapuches en el marco del trabajo de investigación del caso, y que "cualquier intervención" externa podría frustrar sus objetivos
Por su parte, los integrantes del Lof le dijeron al juez que están preocupados por el riesgo que corren los testigos de la comunidad.
Anteriormente, Otranto había tomado declaración a Andrea Millañanco, Soraya Maicoño y Matías Santana, quien dijo haber visto cuando varios gendarmes detuvieron a Maldonado junto al río Chubut, lo golpearon y lo subieron a un camión, para pasarlo a una camioneta que se lo llevó del lugar.