El viernes 9 de junio de 2000, sólo seis meses después de asumir como presidente, Fernando de la Rúa grabó una cadena nacional desde su despacho en Casa Rosada en la que se refirió a la conflictividad social que azotaba al país, pidió “esfuerzo” y “respaldo” a sus medidas económicas y cargó contra las cúpulas sindicales.
La comparación entre los argumentos abrió otra grieta en las redes sociales.
El archivo fue capitalizado por un sagaz usuario que, claro, no tardó en armar un video comparativo con los recientes discursos de Mauricio Macri, en los que también pidió apoyo a su administración y cargó contra los gremios.
Fernando de la Rúa: “He tomado medidas drásticas de ahorro y duelen, lo sé. Me duele a mí tomarlas”.
Mauricio Macri: “A mí me duelen muchas de estas medidas que he tenido que tomar”.
El estallido social del 2001, un fantasma que aterró a todos los gobiernos.
DLR: “¿Alguien puede pensar que no las hubiera tomado si no estuviese convencido de que traerían buenos resultados en el futuro?”
M: “Las he hecho en la convicción absoluta que es el camino que nos va a llevar al progreso”.
La reciente represión a los docentes en la plaza del Congreso.
DLR: “Muchas de estas medidas debieron tomarse hace muchos años”.
M: “Haciendo las cosas que hay que hacer y que no se hacían”.
DLR: “Ya estamos viendo los resultados del esfuerzo realizado en estos seis meses”.
M: “Siento que los primeros resultados se empiezan a ver”.
DLR: “Hacerle un paro al país, no ayuda al país”.
M: “Respeto la decisión de hacer un paro, pero no la entiendo. No ayuda en nada a los trabajadores”.
Como era de esperarse, la grieta volvió a instalarse en las redes sociales. Sectores afines a la oposición, principalmente kirchneristas, no tardaron en compartir el video desde todas las plataformas.
Pero la comparación con el mandatario que debió abandonar el poder en medio de un estallido social tampoco pasó inadvertida por el nucleo duro del macrismo. El fantasma del helicóptero y la ya expresa comparación con el presidente radical no hicieron más que potenciar los mensajes en los que se denuncia un clima de desestabilización.