19 Abril de 2024 13:17
La Conferencia Episcopal Argentina de la Santa Iglesia Católica Romana cuestionó al Gobierno de Milei por la situación social en un documento que tituló "En tiempos difíciles, amar a los demás y alegrar sus vidas", el cual se elaboró tras finalizar su 124° Asamblea Plenaria en Pilar. Además de criticar las políticas libertarias en ese rubro, apuntó contra el narcotráfico y la influencia que tiene sobre los dirigentes de la comunidad en todos los ámbitos.
"Desde hace décadas vivimos tiempos difíciles en nuestra querida Argentina. Hay muchas situaciones que atentan contra la dignidad infinita de la persona humana, como, por ejemplo: avanza la pandemia silenciosa del narcotráfico, que utiliza a los pobres como material de descarte, que promueve el sicariato, que seduce con dinero manchado de sangre a miembros del ámbito político, de la justicia y del mundo empresarial", comenzó la declaración de la reunión de los obispos argentinos.
La política social de La Libertad Avanza (LLA) fue la principal castigada por el comunicado religioso que se publicó este viernes. "A muchos abuelos y abuelas se les presenta el drama de elegir entre comer o comprar los medicamentos porque la jubilación no alcanza", aseguraron por un lado. Mientras que también criticaron que "cierran comedores comunitarios por falta de asistencia y muchos vecinos se quedan sin la posibilidad de esa comida en el día".
"Asistimos a la discontinuidad de políticas públicas de integración de barrios populares, logradas con el consenso de gobiernos de distintos signos políticos y representantes legislativos; también familias despojadas de su tierra natal en beneficio de intereses económicos; hermanos que pierden su trabajo, que sienten que su vida está de sobra, y que no pueden poner el hombro en la construcción de la Patria", enumeraron en el comunicado eclesiástico.
Por otro lado, también aprovecharon para dejar su mensaje en clara a oposición al derecho ganado de las mujeres de elegir su maternidad y de poder tener aborto libre, seguro y gratuito, cuando afirmaron que "se ataca la vida inocente que no ha nacido, y, a la vez, la igualmente sagrada vida de millones de niños y niñas ya nacidos que se debaten entre la miseria y la marginación".
"Son tiempos complejos, por momentos contradictorios, en los que conviven una esperanza y paciencia honda de nuestro pueblo, que habla de su grandeza de corazón, con una incertidumbre y una creciente vulnerabilidad de las personas", analizaron desde la Asamblea Plenaria.
A su vez, la Iglesia remarcó el mensaje de "amar a los demás". "Un amor con gestos, porque nuestros gestos son el modo de demostrarle a nuestro pueblo que entendemos su dolor. Advertir sus heridas y vivirlas en proximidad y cercanía. Tomar partido por los más frágiles, defender su dignidad, implicarnos personalmente en sus gozos y esperanzas, en sus sufrimientos y problemas", pidieron desde la Conferencia Episcopal.
Tras recordar palabras del Papa Francisco en 2020, aclararon que "tender la mano al pobre destaca, por contraste, la actitud de quienes tienen las manos en los bolsillos y no se dejan conmover por la pobreza, y los que tienen las manos manchadas por la complicidad". Mientras que más adelante, precisaron que "la alegría cristiana no es euforia, no es éxito, no es placer, no es un optimismo ingenuo, ni estar siempre bien. La verdadera alegría tiene que ver con el sentido de la vida, con la experiencia de tener un horizonte".
El mensaje político confluyó con lo religioso cerca del cierre del mensaje brindado. "En el actual contexto económico y social argentino es fundamental sostenernos en esa alegría, una alegría profunda y duradera, la que nace del encuentro con el Señor. Es una alegría que nos libera de la desesperanza y del desaliento, evitando transformarnos en profetas de calamidades que sólo desparraman pánico y angustia", revelaron. "Estamos convencidos que el amor con gestos concretos y la alegría son el anuncio más explícito del Evangelio en una sociedad que parece vivir en el constante enfrentamiento, donde priman el individualismo y una libertad sin amor", concluyeron.