12 Diciembre de 2017 13:06
Esta tarde, los diputados se reunieron en el Congreso para debatir la reforma previsional, que ha traído muchos roces desde que se anunció. Sin embargo, las cosas se desmadraron hace sólo unos momentos, cuando algunos representantes de agrupaciones de jubilados ingresaron en la sala e irrumpieron a los gritos.
Se produjeron disturbios dentro del Congreso.
Los principales insultos fueron dirigidos a Jorge Triaca, ministro de Trabajo. "Hay que dar la certeza a las generaciones que vienen de que el sistema previsional les va a dar cobertura", alcanzó a decir el ministro antes de los insultos.
Lo cierto, es que antes de que iniciara la sesión, muchos jubilados se hicieron presentes en el Congreso con carteles para protestar por la reforma. Aunque no pudieron ingresar al recinto, muchos de sus representantes sí lograron hacerlo, y a pocos minutos de que Triaca empezara su discurso, los gritos estallaron por todos los rincones.
La situación se volvió insostenible, y por esta razón, el nuevo presidente de la comisión de Previsión, Eduardo Amadeo, que reemplaza a Mirta Tundis, suspendió la sesión y llamó a un cuarto intermedio.
Los jubilados reclamaron por la aprobación de la reforma previsional.
"Son todos comprados", se quejaban varias señoras mayores, mientras que otra explicó en diálogo con TN que su enojo es porque el gobierno "dice que nos representa, pero nos está vendiendo".
El disgusto de los presentes fue tan grande, que antes de que los empujones se convirtieran en golpes, el diputado nacional Agustín Rossi tuvo que subirse a una mesa para intervenir en una discusión entre varios de los que protestaban.
Como en la sala también había presencia sindical, el secretario general del gremio SUTEBA, Roberto Baradel, señaló por su parte que su reclamo busca que "no se ejecute este saqueo a los jubilados".
