Leonardo Fariña fue condenado a cuatro años de prisión por el delito de evasión por más de 12 millones de pesos en la compra de un campo en la provincia de Mendoza. En el fallo, la Justicia ordenó abrir una investigación sobre el ex titular de la AFIP, Ricardo Echegaray.
El Tribunal Oral Penal Económico N° 1 condenó a Fariña a cuatro años, a pesar de que la AFIP había solicitado una pena aún mayor, de siete años de cárcel. La pena de cuatro años va en línea con el pedido realizado por la fiscal Claudia Barbieri. La condena es por “evasión agravada”.
Sin embargo, uno de los datos más llamativos es que la Justicia ordenó que se investigue si existió responsabilidad del ex jefe de la AFIP, Echegaray, por no cobrar los impuestos obligatorios en la operación realizada por el ex valijero arrepentido Fariña.
El ex jefe de la AFIP será investigado en esta causa.
La condena a Fariña es por la compra del campo en Tupungato, en la provincia de Mendoza. La operación se concretó el 16 de diciembre de 2010 por 5 millones de dólares, en efectivo. Luego, Fariña la vendió por 1.800.000 dólares. Por esa operación, Fariña debió haber pagado $4.620.000, en concepto de IVA; y de $ 7.700.000 por el impuesto a las Ganancias. Sin embargo, no aportó ninguno de los dos impuestos.
Se trata de la causa por la que Fariña pasó más de dos años en prisión entre 2014 y 2016. Luego, el ex esposo de la modelo Karina Jelinek fue liberado tras ingresar al sistema de protección de testigos e imputados, del Ministerio de Justicia, tras su declaración en el expediente que investiga al empresario Lázaro Báez por lavado de dinero, en el marco de la Ruta del Dinero K.
Fariña aseguró que para la compra utilizó dinero de Lázaro Báez.
Fariña declaró en el juicio que el dinero que utilizó para la compra del campo era de Báez, para quien adquirió la propiedad de la provincia de Mendoza. Sin embargo, a pesar de ese testimonio, la Justicia considera que la escritura y la presentación ante el registro de la propiedad se hicieron a nombre de Fariña, por lo que aseguran que el campo era suyo.
En el fallo, el tribunal también dispuso que se investigue las circunstancias en que se vendió el campo, ante la sospecha de que pudo haberse tratado de una operación simulada.