La fiscal de instrucción de la causa que investigaba la muerte de Alberto Nisman, Viviana Fein -que la semana pasada anunció su jubilación- rompió el silencio luego de meses sin hacer declaraciones acerca de la investigación por la muerte de su colega. Se mostró confiada en que se sepa la verdad y negó que la investigación hubiera estado viciada.
Luego de que la querella -asumida por la ex esposa de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado- solicitara que Fein no realizara más declaraciones en medios masivos, la voz de la fiscal dejó escucharse a menudo. Pero ahora, tras anunciar su jubilación, realizó un propio balance de la investigación y donde consideró que no hubo irregularidades en la instrucción que tuvo a cargo.
Aún la Justicia no pudo determinar si la muerte de Nisman fue homicidio o suicidio.
“Le pido a Dios que si fue homicidio se termine que fue así, es lo que siempre busqué: yo creo en Dios, por eso le pido al señor Supremo para que sepan la verdad Arroyo Salgado y sus hijas, y Sara Garfunkel”, remató Fein en diálogo con Vorterix. De todos modos, se volvió a inclinar por la hipótesis de un suicidio, y remarcó: “No hay pruebas para hablar de un acto suicida”.
Pero además, indicó que no tiene una autocrítica para plantearse, más de un año y cuatro meses después de la muerte del fiscal. “Si lo hiciera - señaló Fein - debiera hablar de mis falencias y no puedo decir nada de las distintas divisiones que participaron en los operativos”. Se refería a la toma de pruebas en el departamento de las torres Le Parc de Puerto Madero donde vivía Nisman, donde hubo denuncias respecto de la mala manipulación de las pruebas. “El fiscal (Ricardo) Sanz dijo que la instrucción no le merecía objeción”, sostuvo.
Fein describió que en la madrugada del 18 de enero del año pasado estuvo presente en el departamento junto a otros cinco funcionarios judiciales recabando pruebas. “Se hizo un relevamiento completo, cada uno a su manera: si yo estaba en el baño, había otros funcionarios en otros sectores de la vivienda para evitar manipulaciones”, relató la fiscal, que fue apartada de la investigación -asumida por la jueza de la causa, Fabiana Palmaghini- hasta que finalmente pasó al fuero federal.
Fein declaró que no recibió presiones políticas en la causa por la muerte de Nisman.
FEIN: “NO RECIBÍ PRESIÓN POLÍTICA”
La fiscal desmintió además haber recibido presiones políticas en la causa, y cuestionó la abundancia de teorías sobre la muerte de Nisman. “Hablaron mucho sin conocimiento de la causa, me criticaron, dijeron que yo podría estar influenciada, y yo en ningún momento fui presionada por nadie en particular”, disparó.
En este sentido, aclaró que trató de cumplir con su deber de la mejor manera posible, aunque manifestó que no se trataba de “una causa más” por tratarse de un colega, sumado al marco de la investigación y la denuncia que había presentado Nisman contra varios funcionarios del gobierno, incluida la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Fein además se refirió a la jueza Arroyo Salgado y sus hijas.
“Pienso que algún día los argentinos sabremos qué pasó con Nisman: en el expediente hay pruebas, no creo que haya que apartarse de los informes técnicos y médicos”, sostuvo la fiscal. Fein evitó referirse a la querella de Arroyo Salgado, que fue muy crítica de su investigación e incluso pidió que sea removida: “No voy a atacar a la querella, ellos lo hicieron conmigo: cada uno debe hacerse cargo de las fallas y las dilaciones y no atacar a la inversa”, pidió.