30 Junio de 2015 04:49
La pelea entre periodistas en la era kirchnerista se convirtió en una característica distintiva de estos años. En esta oportunidad, Pablo Sirvén, periodista del diario La Nación, criticó a su colega de C5N, Roberto Navarro, con dos argumentos centrales: que pasó de criticar a Daniel Scioli a alabarlo y que en los últimos años acumuló casi $10 millones en pauta oficial. Navarro es un hombre vinculado al gobierno de Cristina Kirchner y uno de los apellidos más influyentes de la emisora del empresario Cristóbal López.
El periodista de la La Nación criticó con dureza a su colega de C5N.
“Roberto Navarro, el periodista cuya agresiva influencia no para de crecer en el universo de los medios K, abrió su productora La Ñata, en marzo pasado, cuando todavía su prédica hacia Daniel Scioli no era tan gentil como lo iba a ser después de que se supo que la Presidenta había bendecido su candidatura”, lanzó Sirvén en su columna dominical publicada en la página 2 del histórico diario. Y agregó: “La Ñata es, casualmente, el nombre de la chacra náutica del gobernador bonaerense, en Tigre”.
Navarro en una reunión de producción junto al equipo de “Economía Política”.
El periodista de La Nación entendió que la flamante productora de Navarro es una señal de cercanía con el candidato presidencial Daniel Scioli. En la noche del domingo, Navarro se tomó unos minutos en su programa “Economía Política” para responder a las acusaciones. “Dicen que el nombre de mi productora, que es La Ñata, lo puse para quedar bien con Scioli porque su casa se llama así. Mi madre se llamaba así, que murió de cáncer y decidí homenajearle de esta forma”, respondió.
Sirvén aseguró que la postura de Navarro con respecto a Scioli cambió luego de que Cristina Kirchner bendijo la fórmula presidencial junto a Carlos Zannini. “Hace algún tiempo, Navarro no era tan contemplativo con el hoy candidato oficial del FPV y decía que no responde al proyecto kirchnerista y que es difícil imaginarse a Scioli echando al FMI del país o expropiando YPF", detalló Sirvén.
En este sentido, Navarro no dudó en aclarar que “no es un periodista neutral y votaría a Scioli cien veces por encima de Mauricio Macri”. Además, contó que el ataque se debe al crecimiento en el rating del canal para el que trabaja. “Ahora me critican porque tengo otra visibilidad, porque trabajo en el Grupo Indalo que está creciendo y es un medio que se parece a lo que yo pienso. Medimos más que TN, entonces salieron a pegarme”, aseguró.
Sirvén también dejó entrever que Navarro podría haber tenido información oficial acerca de la muerte de Alberto Nisman antes de que se conociera el fallecimiento del fiscal. “Tuvo una curiosa e inquietante primicia en la noche del 18 de enero pasado. El invitado Ricardo Alfonsín hablaba de la presentación en el Congreso, al día siguiente, del fiscal Alberto Nisman. El periodista lo interrumpió: "Me han dicho hace un rato que no va a ir Nisman". A esa hora, el fiscal yacía muerto en un charco de sangre en el baño de su departamento en Puerto Madero”, relató en la columna.
En tanto, la pauta oficial fue otro de los ejes de las críticas. Sirvén escribió que el periodista cobró entre 2009 y 2014. $ 9.500.000 en pauta oficial nacional. “Ellos quieren que los que tenemos un pensamiento nacional y popular seamos todos pobres. Cuando ven que la cifra no es grande suman todos los años que recibiste pauta. Pero no la cobro yo, tengo una productora con empelados y seis programas, si lo dividís te da 30 mil por programa. Hacer sólo éste cuesta 300 mil”, declaró.
Según Sirven la influencia de Navarro creció en el canal a raíz de la salida de Eduardo Feinman. Ejemplificó la situación con un cruce que tuvo con un compañero del canal, el periodista Pablo Duggan. "Yo me comparo con quien se me cantan las pelotas", respondió Navarro ante la duda de su compañero con respecto a un informe periodístico.