30 Marzo de 2016 14:50
La reunión entre el presidente Mauricio Macri y la diputada Elisa Carrió terminó esta tarde en la quinta de Olivos, de la que también participó el radical Ernesto Sanz, en medio de un clima enrarecido por las críticas de la dirigente de la CC-ARI por los "brutales" aumentos que planea el gobierno.
"Fue una reunión dura, franca y muy divertida", afirmó Carrió tras el encuentro y agregó que "Cambiemos es una fuerza democrática que debate todos los temas".
La diputada dijo que la reunión "terminó muy bien" y añadió que "los tres discutimos todos los temas de agenda" durante más de una hora en Olivos.
Antes del cónclave
La diputada Elisa Carrió, una de las socia políticas más importantes de la Alianza Cambiemos, se convirtió en la principal crítica de la gestión de Mauricio Macri.
En medio de la escalada mediática de Carrió -criticó a los principales amigos del presidente Macri y los próximos aumentos de tarifas que se vienen para el mes de abril- la diputada se reunirá esta tarde con el Presidente.
La reunión se realizará en la quinta de Olivos antes de que el presidente Macri viaje esta noche a los Estados Unidos para participar de la Cumbre de Seguridad Nuclear en Washington.
Uno de los temas de conversación serán la serie de tuits que la diputada publicó esta mañana en la que se refirió a los "ajustes brutales" por lo próximo incrementos de tarifas.
Otro de los temas es por la embestida de Carrió contra Daniel Angelici, presidente de Boca, a quien calificó como un operador judicial que interfiere en la Justicia.
Carrió declaró ayer ante el juez federal Sebastián Casanello y el fiscal Federico Delgado, quien había dado impulso a la denuncia originada por los dichos de la diputada en una entrevista con Alejandro Fantino.
Angelici no se quedó atrás y amenazó con querellar a la legisladora si continuaba con sus acusaciones "sin pruebas", según dijo el amigo del Presidente.
Pedido de indagatoria
Este mediodía, el fiscal Delgado imputó a Angelici del delito de "tráfico de influencias" y pidió al juez Casanello que lo cite a prestar declaración indagatoria.
"Trafica influencias quien las tiene. Sino, sería un vendedor de humo. En otras palabras, traficar influencias significa traficar el poder de inclinar la balanza para un lado o el otro, ya sea a través de favores, amistad o abusando de cualquier otra situación de privilegio", escribió Delgado en su dictamen.
Añadió que "la norma sanciona el mero hecho de jactarse de que la administración pública puede obrar de modo ilegítimamente direccionado y busca preservar la transparencia e imparcialidad de la función pública; siempre que, recordemos, la influencia sea real".
Para el fiscal, la declaración que prestó Carrió "en relación a los vínculos que Daniel Angelici posee con diversos miembros del sistema judicial por su condición de presidente del Club de Boca Juniors y persona de confianza al círculo presidencial, lo colocan en un lugar que lo ubica en el grado de sospecha".