Las Fuerzas Armadas comenzarán a ser desplegadas en zonas conflictivas de frontera, con el objetivo de fortalecer controles que buscan frenar el ingreso de drogas al país, en el marco de una “reestructuración” que será anunciada esta mañana por el presidente Mauricio Macri durante un acto que encabezará en Campo de Mayo junto al ministro de Defensa, Oscar Aguad.
La decisión ya despertó polémica y rechazo en sectores opositores, ya que el presidente modificará un decreto reglamentario firmado por Néstor Kirchner en 2006, que le impedía a las Fuerzas Armadas realizar tareas de seguridad interior y sólo intervenir ante agresiones externas perpetradas por otros países.
La primera etapa comenzará a ponerse en práctica desde el 1° de agosto, cuando el Ejército comenzará a desplegarse con unos 500 agentes en el programa Escudo Norte, que actualmente está en manos de las fuerzas de seguridad. La intención es que estén en Salta, Formosa y Misiones.
El anuncio quedará en manos del presidente, que encabezará el acto en Campo de Mayo.
Se trata de una decisión que despertó críticas opositoras. Según detallaron fuentes de la cartera de Defensa al diario La Nación, la presencia militar tiene un “carácter disuasivo frente a las organizaciones del narcotráfico”. Pero la decisión no abarca sólo a 500 efectivos. Estiman que de cara en un año, se sumarían 5.000 uniformados.
El 90 por ciento serán integrantes del Ejército, mientras que el resto será de la Fuerza Aérea. Hay alrededor de 600 militares que custodiarán objetivos que el Gobierno considera “estratégicos” y que hoy se encuentran en manos de la Gendarmería Nacional, la fuerza creada especialmente para el cuidado de las fronteras.
El presidente anunciará la reforma del Sistema de Defensa Nacional.
Se trata de una reformulación que busca darle un nuevo rol a las Fuerzas Armadas, en un contexto en el cual la Argentina no tiene una hipótesis de conflicto bélico activa y debe enfrentar amenazas distintas a las de años anteriores.
Pero además, en una situación de muchas críticas por la falta de presupuesto. Sin ir más lejos, semanas atrás se suspendió el desfile militar por el 9 de Julio, y hubo duras críticas por los aumentos otorgados en una primera instancia al personal civil. Todavía no se definió cómo será el esquema de despliegue de las bases militares, aunque las unidades serán agrupadas en función de la cercanía geográfica y la especialidad.