Gendarmería allanó y desalojó a la delegación Corrientes del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU). Sobre la delegación, liderada por el polémico sindicalista Enrique Omar "Caballo" Suárez , que a su vez era el hombre fuerte del sindicato, pesaba una intervención judicial ordenada en febrero pasado, pero no había podido ser puesta en marcha porque el sindicalista y los suyos se negaban a abandonar la sede.
Enrique Omar "Caballo" Suárez: 27 años al frente del SOMU.
La intervención total del sindicato (no sólo de la sede de Corrientes) había sido dispuesta por el juez Rodolfo Canicoba Corral en febrero pasado. A cargo del gremio quedó la diputada nacional oficialista Gladys González. Sin embargo, los seguidores de Suárez, liderados por Nicolás Fuentes, resistían en Corrientes.
Sobre Suárez -que lleva nada menos que 27 años al frente del SOMU- pesaban todo tipo de acusaciones: entre ellas la de "entorpecimiento de la navegación", por causa de algunas medidas de fuerza como negar asistencia a buques que estaban cercanos a puertos, o , directamente, bloquear los puertos.
Suárez es un sindicalista con vínculos muy sólidos con la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, así como con el Vaticano: el SOMU tiene una radio llamada Papa Francisco. El propio Jorge Bergoglio designó a la directora: la periodista Alicia Barrios.
Suárez, con Cristina y el Papa Francisco.
Canicoba Corral designó una comisión normalizadora del gremio.Desde febrero hasta la fecha se acumularon otras graves denuncias contra Suárez: el empresario naviero Máximo Padilla, por ejemplo, denunció que el sindicalista le pidió un barco a cambio de "protección". Bajo la conducción de Suárez, de hecho, el SOMU se convirtió en una gran corporación que tiene sus propias empresas navieras, agencias de viajes, campos y otros etc. Como los mercantiles de Cavalieri, los gastronómicos de Barrionuevo o los camioneros de Moyano.