Ante el temor de que el reclamo de la Policía Bonaerense tenga su correlato en las provincias, en las últimas horas varios gobernadores comenzaron a analizar y anunciar aumentos salariales para las fuerzas de seguridad provinciales.
Ayer Jorge Capitanich, de Chaco, dispuso un incremento del 7,8 por ciento más dos bonos de cinco mil pesos, uno por “emergencia” y otro por “refrigerio” y el piso salarial será de $38.000.
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En Santa Fe, policías provinciales presentaron un petitorio con demandas salariales al gobernador Omar Perotti. En la ciudad de Rosario, familiares de efectivos policiales reclamaron una suba de sueldos ante la Unidad Regional II de la Policía. Días atrás el ministro de Seguridad provincial, Marcelo Saín, dijo que habrá una suba del 20 por ciento.
Los reclamos también se hicieron sentir en Chubut, donde el gobierno de Mariano Arcioni adeuda salarios de estatales, docentes, médicos y policías. Además hubo protestas en Río Negro, Corrientes y Jujuy.