14 Diciembre de 2016 05:21
Con el foco puesto en reducir el subsidio a la electricidad para 2017, hoy se detallará cuál es el costo de la generación energía, que se definirá en la audiencia pública prevista para las empresas de transporte eléctrico. Ese costo se definirá dos veces por año, en febrero y agosto. El objetivo del Ejecutivo es avanzar en nuevos aumentos.
Así, de los dos incrementos, uno sería absorbido por los usuarios particulares y comerciales. La segunda de las subas anuales sería en septiembre, pero podría ser financiada por el Estado, que paga alrededor de un 70 por ciento de los costos de la generación eléctrica, una suma que según Clarín en 2016 alcanzó unos 9.182 millones de dólares.
El foco del Gobierno está en reducir los subsidios en materia energética.
Por eso, el objetivo del Gobierno es reducir los subsidios en alrededor de 1.500 millones de dólares. De ese modo, los consumidores volverán a sufrir el impacto de las subas. Hoy en día se abona alrededor de un 30 % de lo que cuesta el servicio, y la idea del Ejecutivo es que ese porcentaje suba a entre el 45 y el 50 por ciento durante 2017.
Ayer el ministro de Energía, Juan José Aranguren, detalló que a mediados de enero se conocerá cómo será el incremento en el precio de la generación energética. “Las tarifas eléctricas se establecen dos veces, es el precio estacional, en febrero y en agosto, que es el momento que uno puede establecer el precio estacional”, agregó el ministro, durante la celebración por el Día del Petróleo.
La audiencia de hoy definirá cuáles son los costos de la generación y el transporte energético.
De todos modos, sostuvo que una vez que se evalúen los resultados de la audiencia pública de transporte y distribución eléctrica se definirá el modo en que se trasladará “en forma gradual en los próximos tres años el incremento en el costo de generación para que los subsidios puedan ir reduciéndose de manera gradual”.
El plan del Gobierno no incluiría en la reducción de subsidios a aquellos usuarios que sean beneficiarios de la tarifa social, que hoy en día alcanza a unos 3.750.000 hogares, y que podría extenderse a alrededor de 4 millones en 2017.
Aranguren fue claro. El objetivo del Gobierno es llegar al 2019 con un esquema de subsidios mucho menor a lo que ocurre en la actualidad, y que se prolongó durante los últimos años del kirchnerismo. Así, apunta a que los 9.182 millones de dólares que debió desembolsar el Estado este año, se vayan reduciendo con el paso del tiempo.