Los gremios docentes volvieron a rechazar la propuesta del Gobierno bonaerense de forma “categórica” en el tercer encuentro para negociar salarios. La provincia había descartado incorporar una cláusula gatillo, aunque en cambio propuso un 15 por ciento de aumento en tres tramos y revisar la suba en octubre, si es que la inflación le gana a los salarios. Las autoridades pidieron continuar las negociaciones “con los chicos en las aulas”.
En el encuentro que mantuvieron este mediodía las autoridades de la Provincia con los dirigentes de los gremios docentes, el Gobierno bonaerense insistió en un incremento del 15 por ciento en tres tramos, que se pagarían retroactivos a enero y luego en mayo y septiembre. La oferta repite ese tope y el pago de la bonificación por presentismo; aunque ahora las autoridades agregaron el compromiso de “monitorear la inflación en octubre”.
El objetivo era sentarse a negociar nuevamente en ese mes con los gremios docentes en caso de que existieran diferencias en el incremento del 15 por ciento y la inflación, que el Gobierno nacional estima en el mismo porcentaje, aunque estimaciones privadas y gremiales hablan de una cifra más cercana al 20 por ciento, o por encima. Según detallaron fuentes provinciales, el análisis se haría de acuerdo a las cifras oficiales del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Los docentes rechazaron las propuestas salariales.
Sin embargo, se trata de una diferencia con relación al reclamo inicial de los docentes, que aceptaban el 15 por ciento, siempre y cuando la negociación incluyera la cláusula gatillo, tal como ocurrió en 2017, cuando arreglaron un 24 por ciento, tras 17 días de paro que demoraron el inicio del ciclo lectivo y luego provocaron grandes complicaciones en toda la provincia de Buenos Aires. En un principio, los gremios exigen como mínimo un 20 por ciento.
Hasta el momento, los gremios docentes no lanzaron ninguna medida de fuerza. Fuentes provinciales aseguran que el inicio de las clases previsto para el lunes que viene “depende de los gremios”. Aunque todavía no hablan de paro, esta semana habría un encuentro entre los dirigentes sindicales y no se descartaban que convoquen a una huelga.
Con la propuesta del Gobierno bonaerense, el salario de los maestros que recién ingresan al sistema educativo se incrementará casi $2.000, aunque detallaron que lo cobra apenas el 1 por ciento de los docentes. De esta manera, pasará de $12.500 a $14.375. En promedio, el salario docente con esta oferta pasaría de $24.659 a $28.358.
Por ahora, los gremios no lanzaron una medida de fuerza formal.
Se trata de una paritaria fundamental, ya que desde hace años la negociación docente sirve como referencia para el resto de los rubros. Pero también porque se trata de un sector con más de 300 mil trabajadores: 282 mil docentes y 80 mil auxiliares. En este sentido, desde la Provincia recordaron que en territorio bonaerense hay unos 4,7 millones de alumnos: 3,2 en escuelas públicas y 1,5 en escuelas privadas con subsidios estatales.
EN LA CIUDAD TAMBIÉN
Los gremios docentes de la Capital Federal también rechazaron una nueva propuesta oficial, aunque en una posición más endurecida ratificaron el paro para la semana que viene. El Gobierno de la Ciudad les había ofrecido un incremento del 12 por ciento, tres puntos por debajo de la inflación prevista por la Casa Rosada.