La histórica reunión que mantuvieron hoy en el Palacio de Santa Marta (Ciudad del Vaticano) el Papa Francisco y Hebe de Bonafini, titular de Madres de Plaza de Mayo, prometía dejar el saldo de un marcado reacomodamiento de posiciones. Y lo cierto es que los dichos posteriores de la dirigente social apuntan hacia un acercamiento que seguramente tendrá consecuencias positivas.
Bonafini remarcó que el Papa fue "muy cariñoso" en su encuentro.
Bonafini llegó a la residencia del Sumo Pontífice a las 11.30, hora de Argentina, y se retiró una hora y media después, acompañada por algunos colaboradores y por la esposa del ex secretario de Comercio Guillermo Moreno, Marta Cascales. Y, posteriormente, ofreció sus impresiones en una conferencia de prensa.
Vídeo: Hebe de Bonafini en su encuentro con el Papa Francisco. pic.twitter.com/vfacsNOVbY
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"Le dije que nos equivocamos con él como nos equivocamos con Néstor. Bergoglio creció cuando se transformó en Francisco".
"Le dije que traía una misión muy difícil, que nuestra patria necesitaba de su palabra, que en cinco meses este Gobierno destruyó lo que hicimos en 12 años. Vine a hablar de la angustia y el dolor de un pueblo que vivía feliz".
"Necesitamos que venga. Paró un bombardeo de la OTAN, esto que pasa en Argentina es más fácil".
"Tenemos miedo, mucho miedo, a que algún loco suelto responda a esa violencia que nos están imponiendo".
"No hablamos de los desaparecidos, hablé tal vez de mis hijos cuando me preguntó cómo eran. Me emocioné mucho, venía muy nerviosa".
La dirigente de Madres de Plaza de Mayo relató además que el Papa "fue muy cariñoso" y que ella le entregó como obsequio un mosaico enmarcado con la figura del pañuelo que es símbolo de la entidad que encabeza.
"Permitió que todos los compañeros italianos que no estaban anotados entraran a la entrevista. Pasaron cosas muy importantes que nos demuestran que Francisco esta con el pueblo, no está con los poderosos", agregó Bonafini.